Ábalos respondió así al senador del PNV José Ramón Arrieta, quien vinculó el bloqueo de estos buques en los puertos de Barcelona y Pasaia "con la presión de PP, Vox y Ciudadanos". Según el ministro, todos los barcos "deben recibir una autorización administrativa previa o despacho" antes de hacerse a la mar, que depende de un "procedimiento reglado y, por tanto, nada arbitrario".

Supone que el barco cumpla los requisitos legales que, entre otros puntos, establecen que la navegación se realice en condiciones de seguridad, dijo. Según el ministro, uno de estos requisitos tiene que ver con la normativa internacional que obliga a desembarcar a los náufragos en el puerto cercano más seguro.

"La negativa de Italia y de Malta a recibir en sus puertos a migrantes rescatados por las ONG hace que estos buques se vean obligados a volver a España", prosiguió, lo que "supone una travesía de varios días con muchos tripulantes a bordo para la que no están preparados".

A su juicio, esta práctica "pone en peligro a los propios rescatados, a la tripulación e incluso a otros buques que se hallen en la zona y se acerquen a ayudar". "Un buque no debe estar navegando varios días en condiciones para las que no está preparado", recalcó, y "por eso el despacho está condicionado a que lleguen a acuerdos con las autoridades de la zona SAR" del Mediterráneo Central.

CEDER A LA PRESIÓN

Sin embargo, Arrieta contrapuso esta medida con la decisión de acoger al ‘Aquarius’ y a otros buques de rescate que el Gobierno adoptó al inicio de su mandato. "O ustedes están dando palos de ciego o han dado un giro de 180 grados" en inmigración, señaló.

"Han pasado de un gesto loable a secuestrar dos barcos de dos ONG”, y se preguntó "si no les habrán temblado las piernas para ser coherentes" en su política.

Por ello, pidió al ministro que le asegure que este cambio "no tiene nada que ver con la presión de PP, Vox y Ciudadanos. Para Arrieta, "Europa no quiere testigos molestos en el Mediterráneo, que es hoy la frontera con más víctimas en el mundo".

Por eso, prefiere que "nuestro Servicio de Salvamento, que es civil y público, dependa de Frontex", que da prioridad a la integridad de fronteras y no al rescate.

Así sucede desde hace meses en el Estrecho, dijo Arrieta, tras recordar que el Gobierno intentó firmar un convenio con Proactiva Open Arms.