Los dos comentaron en sus respectivos perfiles de Twitter la dimisión de Pozas, presentada ayer y aprobada hoy en el Consejo de Ministros, supuestamente por haber declarado el excomisario José Villarejo ante el juez que fue él cuando era director de 'Interviú' quien le entregó el 'pendrive' con la información del teléfono móvil de la colaboradora de Pablo Iglesias, Dina Bousselham.

“Pero no tengan ni la más mínima duda de que las cloacas del Estado están completamente desarticuladas”, escribió Montero adjuntando la noticia, en referencia a las afirmaciones que en los últimos días han vertido miembros del Ejecutivo como la vicepresidenta, Carmen Calvo, y el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, asegurando que las cloacas policiales eran cosa del anterior Gobierno del PP.

Menos irónico esta vez, Echenique tuiteó, acompañando también un enlace con la noticia de la dimisión: "Alberto Pozas era, hasta ayer, director general de Información Nacional. Esta Dirección General depende directamente de la Secretaría de Estado de Comunicación, la cual depende directamente de Presidencia (de Pedro Sánchez). Dimite por su relación con el caso Villarejo".

Iglesias nunca ha querido comentar nada del caso, en el que declaró como perjudicado en la Audiencia Nacional el pasado 27 de marzo, porque está bajo secreto de sumario, ni siquiera cuando se le han pedido pruebas de su convicción de que las cloacas siguen existiendo; se ha limitado a recordar que el PSOE unió sus votos a los del PP y Ciudadanos para impedir la comparecencia de Villarejo en el Congreso y a que el policía José Ángel Fuentes Gago, quien fue a Venezuela a buscar testimonios sobre los que sostener que Podemos se había financiado ilegalmente, sigue en el Cuerpo.

Pero parece lógico suponer que el juez Manuel García Castellón le informara de la declaración de Villarejo sobre quién le entregó el móvil, cosa que no aclararon fuentes cercanas al líder de Podemos consultadas por Servimedia.

El ya dimitido ex número dos de la Comunicación de Moncloa, no obstante, negó esa vinculación. "Estoy siendo utilizado para atacar al Gobierno y al presidente, y eso no lo puedo permitir", declaró hoy tras el Consejo de Ministros a los periodistas que asistieron a la rueda de prensa posterior.

Incluso, añadió que, con esta decisión, espera que quienes pretendían mezclar su nombre "con la conocida como 'policía patriótica' vean que estaban muy equivocados, algunos a sabiendas, y que quienes se dejan ofuscar por la tinta del calamar se den cuenta de la labor de despiste y puedan perseguir al calamar".