El presidente dará un paseo por la Seu Vella de Lleida y por la tarde intervendrá en un acto en Badalona junto al primer secretario del PSC, Miquel Iceta; la cabeza de lista al Congreso por Barcelona y ministra de Política Territorial, Meritxell Batet, y el alcalde de Badalona, Álex Pastor.

En esta campaña electoral, el presidente suele decir que tanto los independentistas como la derecha saben que “no habrá referéndum ni independencia en Cataluña” y les pide que sean valientes y sinceros y lo reconozcan públicamente.

Cuestión que ‘olvidó’ en Palma de Mallorca anoche, donde aseguró que para los socialistas “la Constitución es un ideal de convivencia, que tiene múltiples lecturas, y lo que recoge son derechos, libertades, tolerancia, diversidad y pluralidad, y la unidad de España no se garantiza con la uniformidad, se garantiza reconociendo la pluralidad, la diversidad, de este gran país que es España”.

En el programa electoral, el PSOE rechaza tanto el derecho de autodeterminación como el "estado de excepción territorial permanente" que implica la aplicación del artículo 155 de la Constitución en Cataluña. Los socialistas apuestan por más autogobierno.

Ante la crisis actual del modelo, el PSOE aspira a "un funcionamiento más integrado del modelo, de forma que la mayoría de la población de todos los territorios se sienta partícipe", y se remite al contenido de la Declaración de Granada, de 2013, y la de Barcelona, de 2017. Sin embargo, aunque en aquel compromiso se hablaba de avanzar hasta el reconocimiento de la realidad plurinacional, esa plurinacionalidad no aparece ahora mencionada en el programa.

Andalucía y Cataluña tradicionalmente han sido los focos de votos que han llevado a la victoria del PSOE en unas elecciones generales y la formación que lidera Pedro Sánchez aspira a captar el voto de los catalanes contrarios a la independencia y que apuestan por el diálogo para destensar la convivencia.