Durante la sesión de control al Gobierno en el Parlamento de Andalucía, tanto Vox como el PSOE formularon dos preguntas al consejero de Presidencia de la Junta, Elías Bendodo, sobre este polémico nombramiento por no ser andaluz y, en cambio, ser el máximo responsable del Ejecutivo en Cataluña cuando se produjo el referéndum ilegal del 1 de octubre de 2017 y la posterior declaración unilateral de independencia.

Bendodo adujo que el cargo para el que se ha nombrado a Millo “no es nuevo ni mucho menos”, sino que “viene existiendo desde muchos años y tiene unas funciones claras y definidas”. “Nada tiene que ver con embajadas y con órganos prescindibles”, afirmó antes de que le llovieran los reproches de su socio parlamentario y de la oposición.

El consejero de Presidencia de la Junta explicó que el departamento de Millo representa a “muchos andaluces que viven fuera de Andalucía” y que, en su opinión, “durante muchos años han estado abandonados”. Por eso, va a trabajar “por los andaluces en el exterior, tanto dentro de España como fuera de España”.

Bendodo destacó que Millo “tiene la cualificación profesional y experiencia necesaria para ese cago” y por eso considera que es “la persona adecuada para ese puesto”. Ante las fuertes críticas de Vox, replicó con ironía que “parece que hemos nombrado al señor Torra y no es el señor Torra, es el señor que ha luchado contra el independentismo” desde la Delegación del Gobierno durante los últimos años y, además, “tiene vínculos con Andalucía y puede hacer una magnífica gestión”.

También negó que la Secretaría General de Acción Exterior sea un chiringuito político e incluso se jactó de haber eliminado “83 organismos superfluos en cien días” de mandato. “Otros no son superfluos, son necesarios y uno de ellos es la Acción Exterior”, espetó.

CRÍTICAS DE LA OPOSICIÓN

La diputada de Vox Luz Belinda Rodríguez Fernández juzgó que la Secretaría General de Acción Exterior es “otra duplicidad más y otro chiringuito más” en los presupuestos de la Junta que el Partido Popular está utilizando “para la colocación de amigos”.

A su juicio, es “un escándalo” nombrar para este cargo “a un señor que ha tenido responsabilidades parlamentarias en el Parlamento de Pujol, de Mas y de Puigdemont”, que bajo su mandato como delegado del Gobierno se produjo “un referéndum ilegal” de independencia y que el 1-O “no quiso ver la tradición de los Mossos”.

Rodríguez Fernández concluyó por ello que el PP “se vuelve a colocar en lo peor” con el nombramiento de Millo y concluyó que es precisamente la que ha provocado que el partido de Pablo Casado caiga “de 187 escaños a 66” entre las elecciones generales de 2011 y las celebradas en España este pasado domingo 28 de abril. “Ustedes no han regenerado nada y son más de lo mismo. Hemos venido a cambiar las cosas y no a más de lo mismo”, remachó.

Por su parte, la diputada del PSOE María de los Ángeles Férriz Gómez manifestó que este nombramiento es “una falta de respeto al pueblo andaluz” por elegir a un catalán para el puesto e ironizó que el PP ha debido de tener dificultades para encontrar alguien idóneo para el puesto entre “los 8 millones de andaluces” que viven en esta comunidad.

Férriz advirtió de que el PP está convirtiendo la Junta de Andalucía en “el mayor chiringuito de España lleno de amiguetes” y bromeó que el siguiente en ser nombrado podría ser el vicesecretario de Organización del PP, Javier Maroto, dado que en las elecciones generales del 28-A ha perdido su escaño por la provincia de Álava en el Congreso de los Diputados. Incluso, alertó de lo que podría pasar en la Junta si el PP hace lo mismo con “todos los cargos del PP que se han quedado colgados” tras el hundimiento de los populares en el Congreso y en el Senado en las generales.