Juicio Procés

Boya (CUP) puso condiciones a Sànchez y Cuixart para desconvocar la protesta del 20-S

MADRID
SERVIMEDIA

La exdiputada de la CUP Mieria Boya, que tuvo un papel protagonista durante el 20-S, explicó este lunes en el juicio del `procés´ que al final de la jornada de protesta frente al departamento de Economía tuvo una conversación con Jordi Sànchez y Jordi Cuixart, con los que discrepaba sobre la necesidad de desconvocar la manifestación, y que finalmente puso condiciones para apoyar esa desconvocatoria.

En esa reunión estaba acompañada por su compañera de partido Eulàlia Reguant. “Discutí con Jordi Sànchez porque él estaba convencidísimo de que se tenía que desconvocar la manifestación. Nosotras no estábamos de acuerdo y pensábamos que no éramos nadie para pedir a la gente que se fuera”, dijo. Finalmente, las representantes de la CUP pusieron como ”condición” para apoyar la desconvocatoria que se fijara “una cita al día siguiente para que la gente pudiera expresar ese descontento con lo que estaba pasando".

La exdiputada Boya está procesada por desobediencia en el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC), después de que el Tribunal Supremo decidiera traspasarle la parte de la causa en la que se encuentran los acusados del delito de desobediencia. En su condición de procesada, la testigo tiene un estatus especial que le da derecho a comparecer con asistencia letrada y a rechazar todas o algunas de las preguntas que se le formulen.

Boya ha sido citada por las defensas de Jordi Cuixart y Jordi Sànchez y ha comenzado a responder sobre lo sucedido el 20 de septiembre. Según su relato, a primera hora de la mañana acudió al Departamento de Asuntos Exteriores de la Generalitat, donde vio que “había trabajadores de Comisiones Obreras que protestaban contra el registro y tenían pancartas”.

Sobre las 10.30 horas, la diputada recibió un mensaje de coordinación del grupo parlamentario en el que se le pedía que se desplazara a la sede de la Conselleria de Economía. Allí se encontró con las también diputadas Eulàlia Reguant y Gabriela Serra. Boya aseguró que fue a Economía por que como “cargo electo” quería apoyar el derecho de manifestación de la gente. Admitió también que ese día envió “diez o doce tuits haciendo llamadas a la movilización, a que la gente ejerciera su derecho de manifestación ante una situación anormal”.

Insistió en que “el ambiente era festivo y fue fácil llegar hasta la puerta (de Economía). Había mucha gente pero no nos impedía el paso. Consideré que como cargo electo que era, era importante que se me viera y por eso me dirigí a la puerta".

Durante esa mañana también se produjo un intento de registro en la sede de la CUP. Policías “encapuchados” intentaron entrar en la sede, pero no tenían orden judicial, dijo. Boya se trasladó entonces a la sede de su partido. "Pedíamos que la gente se sentara en el suelo de manera pacífica, no violenta, ejerciendo las tácticas de desobediencia civil ante un hecho que luego se ha demostrado que fue ilegal. Pusimos música y estuvimos bailando. No había orden judicial para el registro y nosotros entendíamos que se estaba produciendo un ataque a los derechos de la CUP como partido”, manifestó.

La exdiputada estuvo en la sede de su partido durante unas ocho horas y después volvió a Economía. Según Boya, lo que sucedió en la sede de la CUP durante el 20-S fue un "intento de asalto" de la Policía, que intentó un registro sin orden judicial.

Ya de vuelta en Economía, la testigo y su compañera de partido Eulàlia Reguant vieron a vario periodistas subidos en los vehículos de la Guardia Civil estacionados en la puerta. De hecho, ambas llegaron a subirse a uno de los coches para dirigirse a la gente que estaba concentrada y pedirles que mantuvieran una actitud pacífica.

Decidieron trepar al vehículo porque era "un buen atril" y porque había un grupo de gente joven protestando "de manera más entusiasta", por lo que consideraron que era apropiado recordar las peticiones de "actitud no violenta" y desde los coches les podían escuchar mejor.

"Cuixart y Sànchez nos dijeron que (ese grupo de jóvenes) seguramente eran votantes de la CUP o que nosotras conectaríamos mejor con ellos. Pidieron que les recordáramos las bases de la desobediencia civil no violenta. Por nuestra estatura, necesitábamos algún lugar para que nos vieran y nos reconocieran. Junto a los voluntarios de la ANC, que nos consiguieron un megáfono, consideramos que subir al techo de uno de los dos coches de la Guardia Civil era un buen atril para dirigirnos a la gente”, explicó.

Desde ese lugar, Boya dijo a los concentrados: "Sé que a muchos de vosotros os gustaría estar encima de un Patrol de la Guardia Civil. Yo tengo la suerte de hacerlo...", aseguró que dijo para abordar con sentido del humor su alocución a los presentes, aunque insistió en que nunca quiso dañar los coches.

(SERVIMEDIA)
13 Mayo 2019
SGR/ICG/caa