La reserva hidráulica nacional se sitúa ahora en el 60,3% de la capacidad total, después de que los embalses hayan perdido 92 hm3 en esta última semana, cuando las precipitaciones fueron abundantes en la vertiente mediterránea peninsular y muy escasas en la vertiente atlántica, con el valor máximo registrado en Reus (Tarragona), donde se recogieron 35,2 litros por metro cuadrado, según datos dados a conocer este martes por el Ministerio para la Transición Ecológica.

Los niveles más altos de agua embalsada en la actualidad corresponden al Cantábrico Oriental (93,2%); las cuencas internas del País Vasco (90,5%); Galicia Costa (89,8%); el Cantábrico Occidental (89,2%); las cuencas internas de Cataluña (85,5%); el Ebro (80,2%); Tinto, Odiel y Piedras (79,5%); el Miño-Sil (76,9%); el Duero (65,7%), y la cuenca mediterránea andaluza (64,5%).

Por detrás están el Guadalete-Barbate (62,0%), el Tajo (54,1%), el Guadalquivir (52,7%), el Guadiana (51,4%), el Júcar (41,2%) y el Segura (32,4%).

La serie histórica de la reserva hidráulica nacional, que se remonta a 1990 y a la que tuvo acceso Servimedia, indica que ha habido nueve años con menos agua embalsada que ahora en esta época: 1991 (60,3% de la capacidad total), 1992 (46,0%), 1993 (48,1%), 1994 (52,2%), 1995 (39,8%), 2005 (59,2%), 2006 (57,4%), 2008 (58,3%) y 2017 (57,2%).

Por el contrario, en esta 22ª semana del año los pantanos estuvieron más llenos en 2013, cuando la reserva hidráulica nacional se encontraba al 85,8%, seguido de 2010 (83,7%), 2014 (82,6%), 2011 (81,5%) y 1998 (81,4%).