Discapacidad

Jóvenes de Down Madrid culminan su peregrinaje por la inclusión en Santiago de Compostela

MADRID
SERVIMEDIA

Un grupo de 16 jóvenes de la Fundación Síndrome de Down de Madrid (Down Madrid) ha llegado este sábado a Santiago de Compostela tras completar una nueva edición del Camino de Santiago en la que los peregrinos han recorrido a pie los últimos 113 kilómetros del Camino Francés.

Durante las dos últimas etapas del Camino Francés, los peregrinos han estado acompañados por un grupo de voluntarios de OHL y Fundación Adecco, que se unieron el pasado jueves 11 de julio. Todos los participantes llegaron a la Plaza del Obradoiro, donde vivieron un momento muy emotivo al ser recibidos por sus familiares, que se desplazaron hasta allí para disfrutar de un día junto a los suyos en la capital gallega.

Al llegar, el grupo acudió a la Iglesia de San Agustín para asistir a la Misa de Peregrinos y esa misma tarde sellaron su acreditación en el patio de San Martín Pinario y recogieron la ‘Compostela’, dando por finalizada esta nueva edición del Camino de Santiago.

Alberto Torremocha, uno de los peregrinos de Down Madrid, destacó que tenía “muchas ganas de poder llegar por fin a Santiago”. “Me he divertido mucho haciendo el Camino de Santiago, me lo he pasado muy bien y sobre todo, me siento muy orgulloso de mí mismo por haberlo conseguido”, indicó.

Por su parte, Francisco Arias, voluntario de OHL que lleva ocho años participando en esta iniciativa señaló que su objetivo “siempre es el mismo, convivir con ellos y darme cuenta de que todos somos iguales y de esta forma debemos tratarlos”. “Además, me gusta contar en el trabajo y a mi familia esta experiencia para hacer ver a los demás todo lo que he vivido y hacerles ver que es posible la inclusión de las personas con discapacidad intelectual”, concluyó.

Asimismo, Alfredo Catalán, de Fundación Adecco, apuntó que “sumar la fuerza del voluntariado corporativo de OHL con la energía de acción de Down Madrid mejora la vida de las personas y hace una sociedad más inclusiva y sin etiquetas y en el Camino se demuestra que todos somos iguales y todos aportamos para el beneficio común”.

Este grupo de jóvenes, acompañados por seis personas de apoyo, iniciaron su peregrinaje el pasado 5 de julio en Sarria, localidad lucense desde la que arrancaron esta nueva edición. Durante nueve días, los peregrinos recorrieron una media de 13 kilómetros por etapa, excepto la que separaba Arzúa de Pedrouzo, que llegaba a los 19,6 kilómetros.

Día a día, todos los participantes en esta iniciativa han compartido experiencias con sus compañeros y cada tarde se reunían para escoger a los ‘Peregrinos del día’, un reconocimiento a aquellos compañeros que más se esforzaban y más ayudaban a los demás frente a cualquier adversidad en cada etapa. Las personas seleccionadas recibían la responsabilidad de llevar en la siguiente etapa la ‘Concha de Peregrinos’.

El Camino de Santiago es una actividad fundamental para fomentar la inclusión de las personas con discapacidad intelectual y una oportunidad para que demuestren su afán de superación. Durante el recorrido ponen en práctica sus habilidades interpersonales, mejoran su autonomía y disfrutan de una actividad de ocio alternativa. Además, aprenden a superar todos los obstáculos con los que se encuentran en el día a día del camino y fomentan el crecimiento personal.

(SERVIMEDIA)
13 Jul 2019
BMG/ecr