Los hechos ocurrieron en la mañana del jueves, según ha narrado a Servimedia uno de los jóvenes agredidos, Sergio Espejo, de 37 años, quien tiene obesidad y un 39% de discapacidad reconocida por tener una hernia discal y epilepsia.

Sergio transitaba por la Gran Vía de les Corts Catalanes de Barcelona junto a un amigo de la misma edad, también con obesidad y con discapacidad en una rodilla.

Espejo comentó que un hombre de entre 40 y 50 años comenzó a insultar a él y a su amigo llamándoles "gordos de mierda". Según este joven, el agresor les dijo que se sentía "degradado" porque les estaba siguiendo al sentarse en tres bancos diferentes y que uno de los jóvenes le había tosido varias veces en la cara.

A la altura del cruce de Gran Vía de les Corts Catalanes con la calle Calabria, uno de los jóvenes intentó pedir disculpas al hombre, pero éste trató de agredirle. Después, el agresor golpeó con su mochila en la cabeza a Espejo, quien, además, perdió su mochila porque el hombre se la robó y salió a la carrera.

"Sigo detrás de él, que se pone a pegar a diferentes personas que le intentan parar y que estaban paseando e incluso un chico que estaba en la terraza de un bar recibe un puñetazo", comentó.

Poco después, agentes de los Mossos d'Esquadra se bajaron de una patrulla y detuvieron al hombre, contra el que presentaron una denuncia los dos jóvenes. Al lugar de la detención en la calle Calabria acudieron cuatro vehículos de la policía autonómica, uno de la Guardia Urbana y una ambulancia del SEM (Sistema d'Emergències Mèdiques).

"No es normal que vayas por la calle y te vayan insultando, y ni mucho menos que te vayan pegando", indicó Espejo, quien apuntó que fue informado de que el hombre detenido era de origen melillense y carecía de antecedentes penales.