Así se pronunció su gerente, Paz Casillas, quien estimó “primordial” disminuir los daños que provoca la adicción y “favorecer el cambio general que exige a cada persona superar la drogodependencia”.

Casillas reconoció que España se sitúa “en el pódium europeo en cuanto a delitos de drogas” y subrayó que la fundación atiende a 2.000 reclusos con drogodependencia, el 94,6% de los cuales son hombres, en centros penitenciarios de la Comunidad de Madrid y Castilla-La Mancha, a través de la iniciativa Ariadna.

El programa está dirigido a internos con problemas de drogodependencia que voluntariamente solicitan información, orientación y ayuda.

Cuenta con la financiación del Ministerio de Sanidad Servicios Sociales e Igualdad, la colaboración de la Secretaria General de Instituciones Penitenciarias y la Fundación Sociosanitaria de Castilla La Mancha y tiene como “principal objetivo” la reducción de los daños derivados del consumo, la prevención de recaídas y el proceso de cambio que requiere la superación de la adicción.

Según informó este martes la organización a través de un comunicado, la iniciativa contempla varias fases que incluyen la información y orientación necesaria para las personas privadas de libertad que lo demanden, así como la preparación para la libertad de los que tengan menos de un año de condena efectiva.

Los itinerarios incorporan acciones de mejora de las competencias necesarias para el acceso al empleo dentro de prisión y formación en materias específicas, así como una intervención individual y una labor de intermediación para futuros empleos, tanto dentro como fuera de prisión.

Ariadna se pone en práctica tanto dentro como fuera del medio penitenciario, ámbito al que se destina un equipo especializado que lleva a cabo la “parte esencial del proceso y garantiza su éxito”, precisó la organización.

UNAD recalcó que España es el segundo país europeo con mayor número de personas privadas de libertad cumpliendo condena por delitos relacionados con las drogas, un total de 9.754 de las 59.129 que conforman el total de internos, según los últimos datos registrados por el Consejo de Europa.