El banquero reiteró así durante su intervención en el ‘Foro 2019 Latibex’ el compromiso del Santander por una región que ha estado “apoyando de forma ininterrumpida” durante 21 años y que resulta el caladero del 48% de la base de clientes en todo el mundo.

El compromiso del Santander con la sociedad “es hoy más firme que nunca” y el banco continuará financiando el crecimiento económico y el impulso del desarrollo social, aseguró.

“Tenemos grandes expectativas”, confesó apuntando a las oportunidades que se abren después de que haya celebrado elecciones generales en seis países de la región y en algunos mercados se haya bajado los tipos para activar el crecimiento, “lo que atraerá inversión”.

A título de ejemplo citó México, donde los comicios cerraron un largo periodo de bipartidismo y eso suscitó una incertidumbre inicial, pero que se diluye gracias a que el Gobierno ha “mantenido la ortodoxia”.

En Brasil resaltó que, pese a las dudas iniciales sobre el alcance reformista del país, la realidad es que el Ejecutivo acaba de lograr el apoyo del Congreso para la reforma de las pensiones que ningún mandatario antes había logrado. Indicó que esta situación ofrece un “fuerte impulso a la confianza” de los agentes y la inversión.

El banquero mostró su deseo en que “estos aires de confianza lleguen pronto” a Argentina con el nuevo Gobierno y la ayuda del FMI, y en Chile indicó que “la crisis actual debe dar paso a un nuevo consenso” social que permita recuperar la cohesión social. “Para Santander Chile es un país clave”.

Durante su intervención reconoció que le afecta la ralentización “de muchas economías avanzadas” y las tensiones comerciales como la que libra Estados Unidos y China por su efecto “muy negativo” sobre el comercio mundial. Sin embargo, para 2020 compartió que las perspectivas “serán algo mejores” y se espera que las tensiones “se vayan relajando”.