Seguros

Las mafias que estafan al seguro triplicaron su censo desde 2013 con 500 bandas detectadas

- Un estudio de Línea Directa cifra en seis de cada 100 los siniestros fraudulentos en los seguros de automóviles

- El coste para el seguro de todos los partes falsos supera los 800 millones de euros al año

MADRID
SERVIMEDIA

El número de mafias organizadas que se articulan para estafar al seguro se ha multiplicado por tres desde el año 2013, superando las 500 bandas detectadas durante el periodo analizado. Con la actuación de estas bandas y otros partes falsos reportados por particulares, el seguro soportó un coste superior a los 9.200 millones de euros sólo en el ramo del automóvil en la última década.

Son las principales conclusiones del 'V Barómetro del Fraude del Seguro' presentado este lunes por Línea Directa, para cuya elaboración ha analizado los 2,4 millones de vehículos y 620.000 hogares asegurados por la compañía.

El informe revela que el censo de estas bandas criminales ha ido creciendo año a año desde las 40 detectadas en el ejercicio 2013 a las 123 identificadas en 2018 y que supusieron un aumento interanual del 23%.

Sólo en 2018, último año analizado, estima que la actuación de estas organizaciones criminales y los siniestros falseados reportados por los ciudadanos supuso un coste para el conjunto del sector asegurador de automóviles que “superaría los 800 millones de euros”, equivalente al 0,8% del PIB del país.

“No hablemos de picaresca: son clanes organizados muy peligrosos y normalmente vinculados a otro tipo de delitos graves”, indicó el director de Gobierno Corporativo de Línea Directa, Francisco Valencia, durante la presentación del informe.

Según detalló, este tipo de redes, que a veces presentan conexiones con otro tipo de delitos más graves, presentan una estructura muy jerarquizada y con una cúpula pequeña formada por dos o tres “cabecillas o colaboradores” que van repitiendo sus golpes para obtener un beneficio “ilícito”.

Su foco se centra en el 90% de las ocasiones en reclamar indemnizaciones por falsos daños corporales ya que son los más elevados. Se estima que el coste medio por estas actuaciones criminales ronda los 10.500 euros, ocho veces más que los fraudes convencionales, y su 'modus operandi' principal es estafar a las aseguradoras a modo de “fraude en carrusel” con montajes realizados en rotondas o en colisiones por alcance.

“Pagamos justos por pecadores”, advirtió Valencia, subrayando que el coste del fraude a menudo “se acaba trasladando al precio”. De forma ilustrativa refirió que, en una prima media de 320 euros en el seguro de automóviles, su precio “podría disminuir en 25 euros” de no existir el problema del fraude.

El ejecutivo de Línea Directa admitió que el impacto se ha “empezado a diluir” de la mano de las actuaciones policiales y, sobre todo, del esfuerzo e inversión acometidos por las compañías aseguradoras para combatirlo, pese a que continúa siendo una lacra “que pagamos todos los inocentes”.

No en vano, estima que seis de cada 100 siniestros declarados en España en los dos últimos años fueron falsos. El perfil del defraudador se corresponde con un hombre joven, de 18 a 24 años, desempleado o con trabajo precario.

Por primera vez el estudio da también datos del fraude al seguro del Hogar, que alcanzó el 2,4% de los partes durante los dos últimos años, una cifra considerable teniendo en cuenta las peculiaridades del producto, mucho más desconocido que el de autos y de contratación no obligatoria. Su coste medio ascendería a unos 777 euros por parte falso.

FRAUNDE EN SEGUROS DE HOGAR

En Hogar, los montajes o simulaciones son los fraudes más comunes, con el 31% de las estafas contabilizadas, e intentar que se cubran siniestros anteriores a la contratación de la póliza es el siguiente, con otro 25% de los casos detectados.

Por provincias, Jaén y Sevilla son las provincias con mayor proporción de estafas al seguro, mientras que Las Palmas, Huesca y Lleida son las que menos. Respecto a las redes organizadas, Murcia es la comunidad con mayor proporción de mafias en base a su población.

Por su parte, el fraude entre particulares, como podría ser reportar daños en la chapa del vehículo preexistentes, tiene un coste medio para el seguro de 1.296 euros, casi un 1% más que el registrado en el Barómetro anterior.

La estafa aquí más habitual es incluir en el parte daños ajenos al siniestro, algo que copa el 85% de los fraudes; mientras que en los daños corporales, lo más común es simular lesiones o pretender agravar las ya existentes (99,8%).

(SERVIMEDIA)
27 Ene 2020
ECR/mjg