Sector financiero
La AEB dice al BCE que “no vale el café para todos” y debe analizar qué bancos pueden repartir dividendos
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El presidente de la Asociación Española de Banca (AEB), José María Roldán, se mostró este jueves contrariado ante los sucesivos pronunciamientos desde organismos y autoridades internacionales recetando no pagar dividendos a la banca, ya que, a su juicio, “no vale el café para todos” sino que debe discriminarse según la capacidad de cada entidad.
Durante la rueda de prensa posterior a la Asamblea General de la AEB, Roldán explicó que han sido los bancos los que “voluntariamente aceptaron no pagar los dividendos” de 2019 y el adelanto del cupón habitual con cargo a las cuentas de 2020, además de haber reducido ‘bonus’ de directivos y plantilla.
“A mí me parece que se debe dejar libertad a las empresas, la libertad de decidir cuándo se deben pagar los dividendos o no, ya que las empresas son conscientes de si su situación les permite pagar o no”, defendió, considerando “innecesarios” los sucesivos pronunciamientos en su contra por parte de supervisores y otras autoridades.
La restricción inicial la formuló el Banco Central Europeo (BCE), que reclamó suspender el pago al accionista hasta el próximo mes de octubre o hasta que haya mayor visibilidad sobre el impacto real de la crisis del Covid-19 sobre los balances. Posteriormente han hecho suya esa demanda de suprimir los cupones la Comisión Europea y organismos internacionales de riesgo sistémico.
“No veo qué añaden estos pronunciamientos oficiales”, relató Roldán y emplazó a las autoridades, sobre todo al supervisor bancario, a que, “a futuro, se haga una discriminación” y no someta a la misma regla a entidades que puedan permitirse retribuir a sus accionistas. Según recordó, es función del supervisor valorar si una entidad necesita acumular mayores reservas o no en función de sus riesgos, siempre lo ha hecho y debe continuar haciéndolo.
“El café para todos en materia de dividendos no me parece que sea buena fórmula”, insistió en varias ocasiones durante su intervención, apostando en que cualquier restricción se haga “en función de la rentabilidad” que arroje la entidad correspondiente.
Roldán afirmó que la política de ‘pay-out’ o parte de los beneficios que las entidades españolas distribuyen entre sus dueños o accionistas es razonable y “no hace falta seguir metiendo presión extraordinaria” sobre un sector que “no necesita de presiones y normas adicionales que no añaden nada” y sí generan incertidumbres indeseables y desconfianza en los mercados.
“Tampoco podría ser que la banca sea la única industria que no pudiera repartir dividendo. Hay que hacer análisis”, remachó, tras expresar su convicción de que frente a la crisis y el esperado auge de la morosidad la industria financiera española se encuentra preparada.
Por un lado, recordó que la morosidad ha caído mucho desde la anterior crisis y cuenta con provisiones que cubren en más del 60% los riesgos, siendo de las mejores huchas entre los sistemas europeos. Indicó que el desapalancamiento o desendeudamiento conseguido por las familias y empresas es otra fortaleza que no estuvo en la crisis del 2008 y los bancos disponen además de liquidez y capital o recursos propios suficientes.
Según detalló, la primera línea de defensa es precisamente el modelo de gestión de riesgos y esas provisiones, el segundo serían los resultados y en ambos afirmó que la banca española se encuentra “confortable”. El tercero, que sería el que se intenta proteger con la retención de dividendos, es el capital y si bien la banca española está aquí a la cola en Europa, recordó que es porque la normativa nacional exige acopiar muchos más recursos propios para el mismo riesgo que en otros países de forma que la tasa sale baja en el ranking europeo pero las huchas reales de capital o solvencia son “más favorables que nuestros colegas europeos”.
“Que no se nos estigmatice como industria, es una industria que necesita recuperar la confianza”, clamó Roldán “para que cale en las instituciones europeas porque no puedes comparar la banca alemana, que no tiene rentabilidad, con la banca española que tiene rentabilidad”.
(SERVIMEDIA)
11 Jun 2020
ECR/mjg