Senado

Vox vuelve a responsabilizar a Iglesias de las muertes en residencias y el vicepresidente lo desmiente leyendo el BOE

MADRID
SERVIMEDIA

La senadora de Vox Yolanda Melero volvió este martes a responsabilizar al vicepresidente segundo del Gobierno y ministro de Derechos Sociales, Pablo Iglesias, de las muertes por coronavirus ocurridas en residencias de mayores como supuesto mando único en el estado de alarma, a lo que el vicepresidente contestó una vez más leyendo del Boletín Oficial del Estado (BOE) el decreto que reforzó las competencias sobre ellas de las comunidades autónomas.

En una interpelación en la sesión de control al Gobierno, Melero repitió una vez más las acusaciones y lamentaciones que han proferido en los últimos meses parlamentarios del PP y de Vox, sin buscar nuevos vericuetos por los que atacar a Iglesias, que en los últimos intercambios ya ha recurrido sistemáticamente a leer el BOE para desmentir que la competencia fuera suya.

La senadora interpretó que el Gobierno no se preocupó por los mayores porque “no consiguen que les voten”, que desoyó los llamamientos de auxilio de los establecimientos, que “no quisieron o no supieron reaccionar” ni les enviaron recursos ni personal, ni les permitieron trasladar a hospitales a sus internos, y “con su negligencia y sus decisiones inmorales convirtieron las residencias en casas del horror”.

“A sabiendas de que las residencias no tenían medios ni personal ni recursos, les dejaron como reos condenados a muerte”, prosiguió, preguntando quién elaboró el protocolo que discriminaba entre quienes tenían derecho a respiradores o equipos de protección” según su edad y que tuvieran o no otras patologías. “Ya darán todos cuenta ante los tribunales”, aventuró.

Melero sugirió que el Gobierno podía haber puesto a disposición de las residencias las camas que los equipos de la Vicepresidencia dijeron haber encontrado en instalaciones de servicios sociales o las de la sanidad privada, le acusó de ocultar sus ataúdes para convertirlos en mera estadística y terminó preguntando qué protocolo tiene elaborado para las residencias en un hipotético nuevo brote de coronavirus.

Iglesias, que comenzó reprochando a los senadores del resto de grupos por haber hecho “mucho ruido” durante la intervención de su interpeladora, pasó en seguida a atacarla señalando que “no podemos normalizar la mentira”, el “instrumento político más frecuente de la ultraderecha política y mediática”, sino que consideró una obligación moral escandalizarse ante una mentira “tan burda, tan miserable” y que “falta al respeto” como atribuir una vez más al Gobierno central la competencia sobre las residencias.

Respondiendo a la pregunta en sí, Iglesias informó de que la Comisión Delegada del Sistema para la Autonomía y la Atención a la Dependencia del Consejo Interterritorial de Servicios Sociales y Dependencia creó recientemente un grupo de trabajo para desarrollar recomendaciones para las residencias en caso de rebrote. En él participarán “las autoridades competentes, como son las comunidades autónomas”, además de otras administraciones y entidades.

Ante los “argumentarios” de su interlocutora, el vicepresidente se ufanó de contestarle con documentos oficiales como el BOE del 23 de marzo para concluir que había “mentido” y que las residencias seguían siendo competencia de las comunidades tras el decreto que, según Vox, convirtió al Gobierno central en mando único. “Ha tenido usted la desvergüenza de subir a la tribuna a contradecir al BOE”, le afeó.

Como siempre en estos lances ya recurrentes, Iglesias enumeró el fondo de 300 millones a repartir entre comunidades para contratar personal en las residencias, la consideración de los servicios sociales como esenciales, igual que los sanitarios, las desinfecciones de la UME y que permitió a los gobiernos regionales intervenir en las residencias, públicas o privadas, entre otras medidas con las que el Ejecutivo central “reforzó las competencias” de las comunidades.

“No se puede despreciar tanto la verdad”, continuó, revirtiendo las acusaciones de Vox sobre protocolos de cribado de enfermos contra el Gobierno de la Comunidad de Madrid, a quien Vox sustenta, e incluso terminó citando una intervención de la portavoz de este partido en la Asamblea de Madrid, Rocío Monasterio, en la que le pidió a la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, que no vuelva a dejar atrás a los mayores. “Y usted tiene la desvergüenza de venir a negar lo que dijeron ustedes en la Asamblea de Madrid”, finalizó.

En la réplica, Melero insistió en que, ante un posible rebrote, las residencias necesitarán más financiación, más recursos y más personal, y, más en general, pidió al Gobierno que aumente de un 33% a un 50% la financiación de estos centros.

Ante la crítica de Iglesias por enmendar a Monasterio, la senadora aseguró que Vox ha denunciado a todas las administraciones y exige responsabilidades a todos, pero sobre todo al vicepresidente, que tras ponerse “las medallitas” en aquella rueda de prensa de marzo, “ha escurrido el bulto culpando a las comunidades”. Luego lo rebajó a que los ciudadanos no admiten que el Gobierno y las comunidades estén echándose la culpa mutuamente.

A Iglesias tampoco le valió esta solución salomónica, sino que objetó que lo ocurrido no ha sido “una guerra entre administraciones, sino un problema de recortes en la sanidad pública porque el PP y Vox prefieren las privatizaciones. “Ustedes, que dicen que critican a todo el mundo, jamás les hemos escuchado una sola crítica a las privatizaciones”, añadió, censurando que en la comisión de reconstrucción este partido no ha hecho ni una sola propuesta sobre residencias de mayores, y celebrando irónicamente que casi lo prefiere.

(SERVIMEDIA)
30 Jun 2020
KRT/mjg