Clima

El hemisferio sur podría tener hasta un 30% menos de lluvia a finales de siglo

MADRID
SERVIMEDIA

Los países tropicales y subtropicales del hemisferio sur podrían enfrentarse a sequías más prolongadas en el futuro hasta el punto de que las precipitaciones anuales podrían disminuir hasta en un 30% a finales de este siglo en comparación con los niveles actuales.

Así se desprende de un estudio internacional Liderado por Gabriel Marques, doctorando en el Instituto Oceanográfico de la Universidad de Sao Paulo (IO-USP), en Brasil, y publicado en la revista 'Scientific Reports'.

Una de las principales variables analizadas es un aumento de 3ºC en la temperatura media global respecto a la era preindustrial (alrededor de la década de 1850), lo que podría ocurrir entre 2050 y al final del siglo, salvo que se mitiguen los efectos del cambio climático.

El estudio se basa en modelos climáticos del periodo cálido del Plioceno medio, que ocurrió hace unos tres millones de años y comparte características con el actual calentamiento del planeta.

Entonces, antes de la aparición del Homo sapiens, las temperaturas del planeta eran entre 2ºC y 3ºC más altas que en la época preindustrial. Las de la superficie del mar en latitudes altas aumentaron hasta 9ºC en el hemisferio norte y 4ºC en el sur. Y los niveles de dióxido de carbono (CO2) en la atmósfera eran similares a los de ahora, con unas 400 partes por millón (ppm).

Según los autores, sus simulaciones mostraron que uno de los cambios más notables en las lluvias de verano del hemisferio sur a mediados del Plioceno en comparación con las condiciones preindustriales se produce en regiones subtropicales a lo largo de las Zonas de Convergencia Subtropical (STCZ, por sus siglas en inglés). Otro cambio está asociado con un desplazamiento hacia el norte de la Zona de Convergencia Intertropical (ZCIT), debido al aumento constante de las precipitaciones en los trópicos del hemisferio norte. La precipitación media total de noviembre a marzo a lo largo de las STCZ disminuye en ambos modelos.

"Estos cambios dan como resultado trópicos y subtrópicos del hemisferio sur más secos de lo normal. La evaluación del Plioceno medio agrega una restricción a los posibles escenarios futuros más cálidos asociados con diferentes tasas de calentamiento entre hemisferios", afirma el artículo.

DEFORESTACIÓN EN LA AMAZONÍA

Ilana Wainer, coautora del trabajo y profesora en el IO-USP, indica que el Plioceno medio es el período más reciente en la historia de la Tierra en el que el calentamiento global fue similar al proyectado para el resto de este siglo. "Es posible poner la variabilidad natural esperada en este contexto y distinguirla del cambio causado por la actividad humana", apunta.

Para Marques, ésta es la primera investigación detallada de los cambios de precipitación en el hemisferio sur durante el Plioceno medio. "Comprender la circulación atmosférica y la precipitación durante los climas cálidos pasados es útil para agregar restricciones a los escenarios de cambio futuros", recalca.

Prácticamente no hubo impacto externo sobre la vegetación en el Plioceno medio, cuando la selva amazónica era mucho más grande, generaba más humedad y ayudaba a compensar el clima más seco de la región, según Marques, quien agrega que las sequías futuras serán peores si la deforestación y las quemas continúan al ritmo actual.

Los datos del Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales (INPE) en Brasil muestran un aumento de un 34% en la deforestación en la Amazonía entre agosto de 2019 y julio de 2020 en comparación con el año anterior. Entonces, más de 9.200 kilómetros cuadrados de bosque fueron destruidos en 12 meses. Desde 2013, la deforestación en la Amazonía se ha recuperado para alcanzar niveles altos en años consecutivos, después de una tendencia a la baja en comparación con la década de 1990.

El INPE también refleja un incremento del 28% en los incendios forestales en la Amazonía en julio de 2020 en comparación con el año anterior, considerado el peor desde 2010. Para Marques, un clima más seco y las temperaturas más altas en América del Sur podrían disminuir las precipitaciones anuales hasta en un 30%, lo que provocaría escasez de agua en todo América del Sur.

(SERVIMEDIA)
23 Sep 2020
MGR/gja