De este modo, se garantizan pilas para los procesadores de los implantes cocleares de estas personas. Desde los centros territoriales de la ONCE, la Unidad Técnica de Sordoceguera se encarga ya de repartir estas pilas.

Aunque varía mucho en función del modelo y el uso, se estima que una persona con implantes cocleares puede utilizar alrededor de 250 pilas de media al año, y aquellos que son usuarios de dos implantes más de 500, por lo que la donación podría acercarse al gasto de pilas de un año.

Esta acción solidaria es fruto de la estrecha cooperación que la ONCE y Fundación Gaes mantienen desde hace varios años y que ha quedado plasmada mediante la firma de sendos convenios de colaboración.

ATENCIÓN A LA SORDOCEGUERA

La Unidad Técnica de Sordoceguera de la ONCE (UTS) se encarga de detectar las necesidades específicas de las personas con sordoceguera y orientar los criterios técnicos que facilitan su cobertura .

Entre otras acciones, analiza y estudia necesidades específicas y características sociodemográficas del colectivo de afiliados a la organización con sordoceguera; elabora orientaciones técnicas para la prestación de servicios y seguimiento de acciones en esta materia; propone actuaciones y proyectos de investigación para la mejora de la calidad de la atención de este colectivo; y coordina técnicamente la actuación de los profesionales especialistas en sordoceguera de zona.

También realiza una valoración cualitativa funcional de la pérdida auditiva y valora los expedientes de solicitud de reconocimiento de la condición de afiliado con sordoceguera.

La unidad está formada por técnicos especializados en sordoceguera de diferentes perfiles profesionales, que abarcan todas las áreas de atención. A ello se suma la acción de una Red de Especialistas en Sordoceguera de Zona (PESZ) distribuidos estratégicamente por diferentes áreas del Estado, como elementos de apoyo específico para la atención del colectivo de afiliados a la ONCE que además tienen reconocida la condición de sordoceguera.