Anna Elisa acudió el 13 de octubre a un gimnasio de la localidad de Alcorcón para realizarse una valoración física con una entrenadora personal. A la hora de realizar las mediciones corporales, la trabajadora le comunicó que debía valorarle como un hombre, pese a que la usuaria del gimnasio atestiguó con su DNI ser una mujer.

La entrenadora insistió en que su cuerpo era masculino y, según la denunciante, le hizo preguntas personales como si se hormonaba. Fuentes del gimnasio reconocieron a Servimedia lo ocurrido y aseguraron que se trata de una entrenadora personal ajena a la compañía con la que ya han decidido dejar de colaborar.

Asimismo, el centro deportivo aseguró que no hacen ninguna distinción entre sexos a la hora de inscribir a sus socios y que, inmediatamente, pidieron disculpas a la mujer por el trato recibido por parte de la entrenadora, que pertenece a una empresa con la que colabora el gimnasio.

La ley de Identidad y Expresión de Género e Igualdad Social y no Discriminación de la Comunidad de Madrid establece el reconocimiento de la identidad de género “libremente manifestada” en cualquier ámbito, ya sea público o privado.

La mujer transexual ha presentado una denuncia ante la Consejería y ante las autoridades de consumo de la Comunidad de Madrid amparándose en su derecho a ser tratada como mujer.