PSOE Andalucía

El futuro político de Díaz, en las manos de Sánchez

MADRID
SERVIMEDIA

Hace dos años que Susana Díaz ganó las elecciones autonómicas en Andalucía, pero perdió el gobierno de la Junta y comenzó su tránsito en la oposición en el que el presidente del Gobierno y secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, optó por no inmiscuirse.

Sin embargo, los movimientos en el PSOE andaluz y en la dirección a nivel nacional comienzan a incrementarse hasta el punto que, según varias fuentes consultadas por Servimedia, aseguran que “todo” dependerá de lo que Sánchez decida.

Más allá del poder que se le confiere a Sánchez en esta operación, fuentes socialistas andaluzas aseguran que el hoy presidente del Gobierno deberá sumar en su lista de prioridades del partido “qué hacer” con Díaz porque el “tiempo pasa” y el Gobierno andaluz que preside el popular Juan Manuel Moreno se afianza porque “no tiene nadie enfrente”.

Así las cosas, en Ferraz son ya varios de la dirección los que han puesto los ojos en Andalucía porque las encuestas arrojan que Díaz “no tira” y se analiza si deben hacer un cambio de candidato. En ese marco, siempre según varias fuentes consultadas, está la operación de lanzar el nombre del diputado por Jaén, Felipe Sicilia para “remover el avispero”.

No obstante, algunos consideraron “apresurada y atropellada” la jugada del que llaman “candidato asturiano”, por el apoyo que tiene Sicilia de Adriana Lastra, vicesecretaria general del PSOE y portavoz parlamentaria. También critican que la ‘número dos’ ha entrado con esa estrategia como un “elefante en cacharrería”.

No obstante, algunos sectores del PSOE, tanto nacional como andaluz, celebran que se ha movido el partido y, pese a la pandemia, se empieza a tomar conciencia en el PSOE de que la situación de Andalucía debe importar en la Ejecutiva si quieren recuperar el Gobierno de la Junta.

En esa jugada es en la que ya meten al líder del PSOE. Desde que la venció en las primarias de 2017, Sánchez ha optado por dejar hacer a Díaz en la federación socialista pese a que muchas voces de su entorno pedían que acabara políticamente con ella. Cuando perdió la Junta, algunos apostaron por una “necesaria renovación”, en lo que algunos llamaron operación “fruta madura” porque caería por sí sola.

Pero Díaz mostró su lado más conciliador con el presidente del Gobierno, y Sánchez mantuvo la estrategia de defender el mandato de Díaz en el PSOE andaluz dejándole que en las diputaciones provinciales y en las delegaciones de Gobierno triunfasen sus candidatos frente a los que proponían otros próximos a Sánchez.

La expresidenta continúa ahí, al frente de una federación que le cuesta cada vez más controlar, como firme defensora de las acciones del Eejcutivo de Sánchez.

Ahora consideran desde algunos sectores, inclusos los que antaño estaban en contra del secretario general, que ha llegado el momento en el que Sánchez debe tomar conciencia de la situación del PSOE andaluz.

Ahí, según la posición que adopte Sánchez, podrá decidir incluso si alguien le hace frente a Díaz en unas primarias para liderar el partido en Andalucía, la mayor federación del PSOE. Muchos piensan que el presidente debe decidir si toma partido por Díaz, por otro candidato, o si decide ser neutral y que las primarias decidan verdaderamente el futuro del partido.

La posición de Sánchez, que paradójicamente ahora representa el ‘aparato’, marcará también quién puede ser “la alternativa que aún no tiene líder” que se enfrente a Díaz en unas primarias. También, si todo el partido sacará la “artillería” en favor de ese candidato sobre el que el secretario general deposite sus esperanzas, o deberán dejar actuar a las elecciones internas. “Díaz desapareció en las primarias que perdió y todavía sigue sin verlo”, resume una fuente muy próxima a Sánchez.

(SERVIMEDIA)
07 Dic 2020
MML/clc/krt/man