La productividad de materiales, o cantidad de Producto Interior Bruto (PIB) generado por unidad de consumo de materiales, alcanzó los 2.801,8 euros por tonelada, lo que supone un incremento del 5,1% respecto a 2018, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) dados a conocer este miércoles. Por su parte, el consumo de materiales por habitante disminuyó un 3,7% hasta situarse en 9,0 toneladas.

Al igual que en años anteriores, el principal componente del consumo de materiales fue la extracción nacional, con el 82,9% del total. Alcanzó los 353,1 millones de toneladas, un 3,5% menos que en 2018.

El balance comercial físico (importaciones menos exportaciones) fue de 73,0 millones de toneladas en 2019, prácticamente lo mismo que en el año anterior. Las importaciones alcanzaron los 261,0 millones de toneladas, frente a los 188,0 millones de las exportaciones.

Los principales materiales extraídos en España durante el año pasado fueron los minerales no metálicos (principalmente piedra caliza, yeso y arena) y la biomasa (donde destacaron los cereales, y las frutas y hortalizas), con 209,8 y 124,8 millones de toneladas, respectivamente. La extracción de minerales no metálicos se incrementó un 2,4%, mientras que la de biomasa disminuyó un 10,4%.

Los combustibles fósiles (carbón, crudos del petróleo, gas natural y derivados) fueron los materiales con mayor peso en el balance comercial físico de 2019, tanto en importaciones (50,8% del total) como en exportaciones (28,2%). Por detrás se situó la biomasa (20,8% y 25,2%, respectivamente).

Los combustibles fósiles presentaron el balance comercial físico más positivo (79,7 millones de toneladas). Por el contrario, los minerales no metálicos registraron el más negativo (-24,4 millones).