Así lo señaló Fernando Grande-Marlaska en la sesión de control al Gobierno en el Congreso, en respuesta al diputado del PP Borja Sémper, que le preguntó si es cierto que, como apuntaron esta semana informaciones periodísticas, tiene “intención de relevar a la cúpula de la UCO (Unidad Central Operativa) camuflando como un ascenso lo que no es más que una purga y un burdo intento por entorpecer su labor”.

Sémper achacó al ministro “el vergonzoso cese del coronel Pérez de los Cobos”, o el asesinato de dos guardias civiles “arrollados por una narcolancha en Barbate, que evidenció los escasos medios y los precarios medios con los que cuenta la Guardia Civil”.

En la misma línea recordó “la muerte de 23 seres humanos en la valla de Melilla, su reprobación por dos veces en esta Cámara y una en el Senado”.

A juicio de Sémper, son “hechos que individualmente cada uno de ellos hubieran provocado o su dimisión o su cese, pero estamos lamentablemente en la España ‘sanchista’”.

Por ello, aseveró, “hoy muchos españoles ven con inquietud los próximos pasos de su gobierno para tapar la corrupción”.

En su réplica, Marlaska esgrimió que “a diferencia de lo que ocurría durante los gobiernos del Partido Popular, las Fuerzas y Cuerpos de seguridad del Estado seguirán trabajando con imparcialidad, neutralidad y bajo la dirección de los jueces y fiscales” y no con “policías patrióticas ni destruyendo pruebas, ni tampoco evidentemente espiando a los oponentes políticos”.

Sémper usó su dúplica para asegurar que, si Marlaska interviene para cambiar a la cúpula de la OCU, “nos tendrán en frente”, y añadió que “de todas las cosas que a mí me quitan el sentido del humor” una es “es el ataque indiscriminado a la Guardia Civil, indiscriminado e injustificado, entre otras cosas porque estoy aquí gracias a la Guardia Civil”.

El diputado del PP le afeó a Marlaska que “compañeros suyos de escaño han hablado de UCO patriótica, cloacas del Estado, guerra sucia en referencia a la Guardia Civil”, le preguntó si le parecía normal “un gobierno en el cual sus ministros se dirigen así, a las Fuerzas y Cuerpos de seguridad del Estado”.

Marlaska cerró su intervención alegando que “a la Guardia Civil a la UCO se la defiende dándole más medios, dándole evidentemente más personal como realiza este Gobierno”.

RELEVO SIN FECHA

Cabe recordar que fuentes del Instituto Armado informaron el pasado lunes a Servimedia que el eventual relevo del coronel Rafael Vicente Yuste Arenillas al frente de la UCO debido a su ascenso a general no implica que se le vaya a sustituir y que no hay fecha para un relevo, ya que depende de procesos internos y no de la actualidad de los casos de corrupción.

Se da la circunstancia de que el coronel ha realizado este año, al igual que sus compañeros de su promoción, el denominado curso de capacitación para el empleo de general, lo que se hace bajo el ámbito del Ministerio de Defensa.

Las fuentes consultadas indicaron que este curso es requisito para poder ascender a general, pero no significa que asciendan todos los que lo completan.

Además, dentro del Instituto Armado, este proceso es complejo, ya que se evalúan todos los coroneles que pueden subir de rango y el ciclo de ascensos empieza este próximo 1 de julio. A partir de esa fecha se puede pasar a ser general una vez que se produzca una vacante.

En todo caso, si eventualmente en los próximos meses el responsable de la UCO asciende y hay que buscarle un sustituto, su sucesor se elegirá entre los coroneles en activo. La propuesta del eventual sucesor saldrá de la directora de la Benemérita, Mercedes González, y debe ser aprobado por la titular de Defensa, Margarita Robles, y de Interior, Fernando Grande-Marlaska.