Este plan, elaborado conjuntamente por los Ministerios de Asuntos Exteriores y Sanidad, establece una lista de grupos prioritarios para la vacunación, entre los que se encuentran personas refugiadas, desplazadas y solicitantes de asilo, países menos adelantados en el desarrollo de la vacunación y Estados socios de la Cooperación Española donde no está garantizado el acceso del 20% prioritario de la población.

De este modo, el Gobierno reafirmó el compromiso para un “acceso equitativo, universal y asequible” a las vacunas y para el “refuerzo de los sistemas de salud y del multilateralismo” como fórmulas para afrontar la pandemia.

El Ejecutivo canalizará su contribución de vacunas a través de Covax, que será el principal mecanismo de distribución de las dosis, el Mecanismo de Donación de la UE, la ONU, contextos humanitarios de especial interés para España, organizaciones multilaterales y regionales y el ámbito bilateral.

También se establecerá una reserva estratégica para necesidades imprevistas, mientras que la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (Aecid) ofrecerá su apoyo a los países en la preparación y la distribución de las vacunas.