Así lo trasladó la ministra de Hacienda y portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, en la rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Ministros, en la que también estuvo la vicepresidenta primera del Gobierno, Carmen Calvo.

Calvo separó el camino que ahora se “transita” en Cataluña tras las elecciones del 14-F para la formación de Gobierno y avanzó que las relaciones con el que resulte serán desde un “altísimo sentido de la responsabilidad” para “resolver” situaciones actuales como las “acumuladas”.

Como otro “espacio”, y preguntada por la relación con ERC en el Congreso, Calvo admitió que es "un grupo que habitualmente nos apoya y nos acompaña, habitualmente, porque otra veces no, y como otros grupos parlamentarios, trataremos continuamente de cuidar en nuestras relaciones, por cuanto el Gobierno de coalición, con 155 escaños, tiene que hacer un trabajo de diálogo, escucha y de respuesta continua”.

En la intervención inicial, Montero resaltó la “normalidad” con la que se desarrolló la jornada electoral y con la que los catalanes pudieron “ejercer su voto y expresar cuál es su opción cara a la conformación del próximo Gobierno en Cataluña”.

“Desde el Gobierno de España seguimos confiando, como lo hemos hecho siempre, en que el diálogo sea la base sobre las que se mantenga las relaciones entre el futuro Gobierno en Cataluña y el Gobierno en España porque eso nos permitirá superar de una vez por todas la fractura social, la fractura de convivencia que existe en Cataluña”.

La vicepresidenta primera del Gobierno, Carmen Calvo, restó importancia a que las fuerzas independentistas superen en l 50% del Parlamento porque "no ha lugar" constitucionalmente a un referéndum de autodeterminación, simplemente porque "no es legal".

Por otra parte, preguntada por la situación de los indultos solicitados para los líderes independistas que están en prisión, Calvo se limitó a indicar que siguen “tramitándose” como “todos” los demás procedimientos y que aún están a la espera de informes preceptivos.