Con motivo del Día del Libro y la Lectura, que se celebra mañana, 23 de abril, el movimiento de la discapacidad desea poner el foco en la edición digital de publicaciones, tanto literarias y técnicas como educativas, que con la expansión del libro electrónico es ya una parte muy relevante del mercado editorial.

Para el Cermi, la legislación general en materia de libro y lectura debe ser modificada para establecer como obligación a los editores que los productos digitales nazcan de acuerdo a parámetros de accesibilidad universal al contenido, a fin de que puedan ser usados y disfrutados por todo tipo de personas con discapacidad y mayores que precisen de soportes libres de barreras tecnológicas.

La producción editorial electrónica desde el inicio, en clave de accesibilidad, es un aspecto sin mayores complicaciones, ya que el avance tecnológico disponible lo permite, por lo que la legislación ha de imponerlo y la industria asumirlo como una cuestión de no discriminación por razón de discapacidad y de ampliación del público lector.