Juan Carrión, presidente de Feder, agradeció a la fundación “su labor por los colectivos más vulnerables” y el apoyo que supone esta iniciativa para las familias y menores ‘‘en un momento en que la innovación tecnológica se ha convertido en un pilar fundamental para la continuidad socioeducativa de nuestra infancia’’.

Debido a la pandemia, los centros educativos innovaron a la hora de impartir clases en modalidad virtual o mixta. Carrión explicó que ‘‘para garantizar que todos los menores con enfermedades raras puedan acceder a ellas, desde Feder se facilitarán los medios necesarios para poder dar continuidad a su educación’’.

El proyecto persigue favorecer el acceso a la educación de estos menores, dotándoles de medios tecnológicos para impulsar su inclusión educativa y social. Este colectivo se enfrenta a una situación de especial vulnerabilidad debido a las consecuencias de la Covid-19 por el miedo al contagio y a la incertidumbre de las posibles implicaciones del virus en estas patologías.