Sector financiero

Un 5% de las pymes vio denegado su préstamo hasta marzo, aunque la mayoría notó una mejora en la financiación, según el BCE

MADRID
SERVIMEDIA

Un 5% de las pymes españolas sufrió denegaciones en sus préstamos entre los pasados meses de octubre y marzo, aunque la mayoría apreció mejoras en la financiación con mayores cuantías o extensión de los plazos, según revela la última encuesta realizada por el Banco Central Europeo (BCE).

El estudio, donde evalúan su situación económica y financiera de los últimos seis meses y que ha sido recogido en un artículo publicado este viernes por el Banco de España, detalla que “el porcentaje de pymes cuyas peticiones de financiación fueron rechazadas en el período comprendido entre octubre de 2020 y marzo de 2021 aumentó en 2 puntos porcentuales con respecto a lo observado seis meses antes, hasta situarse en un 5%”, por encima del 4% observado en el conjunto de la Unión Económica y Monetaria (UEM).

Sin embargo, la mayoría reconoció una mejora de acceso generalizada a la financiación, a pesar de que su actividad “siguió deteriorándose”, aunque “de forma más moderada que en la ronda anterior” por el contexto de debilidad económica.

Las pymes señalaron, sin embargo, un cierto repunte de los tipos de interés y un endurecimiento de las garantías requeridas, aunque lograron cuantías superiores de financiación y a mayor plazo, algo que el Banco de España estima que puede estar relacionado con las refinanciaciones de los préstamos avalados por el ICO.

En concreto, el porcentaje neto de empresas que declararon un aumento en los tipos de interés creció significativamente hasta el 14%, 10 puntos porcentuales más que en la encuesta previa del BCE que analizaba los seis meses anteriores. El porcentaje de compañías que señalaron un aumento en la cuantía de los préstamos superó en un 14% a las que reportaron lo contrario, frente al 25% de la ronda previa, y también alcanzó el 25% al ser cuestionado sobre una mejora o extensión de los plazos de amortización, tasa que crece en 5 puntos porcentuales frente a seis meses antes.

La última encuesta revela que “continuó el deterioro de su actividad, como consecuencia de la debilidad de la situación económica, si bien a un menor ritmo que en el período comprendido entre abril y septiembre de 2020, en el que tuvo lugar la primera ola de la pandemia”.

Así, aunque el número de empresas que declararon un aumento de las ventas entre octubre de 2020 y marzo de 2021 fue, por tercera vez consecutiva, inferior al de las que señalaron lo contrario. La diferencia entre ambos grupos o porcentaje neto fue del 35% en favor de las que reportaron caídas del negocio, pero dicha tasa se modera frente al 55% de la edición anterior de la encuesta.

Las empresas que reportaron pérdidas frente a las que lograron beneficios fue un 43% superior por dicha caída de la facturación y el aumento de los costes, aunque también mejora frente al 56% que lo había hecho en la ronda previa. El 43% sigue siendo, además, superior al 35% del conjunto de la Unión Económica y Monetaria (UEM).

En cuento a los problemas o su principal preocupación, la falta de clientes fue el motivo señalado por un mayor porcentaje de pymes españolas (un 24%), mientras que el acceso a la financiación solo lo citó un 10%, muy próximo al 9% que lo hizo a escala UEM.

Un 29% de las pymes españolas solicitaron préstamos, cifra casi 20 puntos porcentuales inferior a la encuesta previa que coincidió con el intenso recurso de las pymes españolas a las líneas de avales públicos gestionadas por el ICO que se crearon en 2020 para mitigar los efectos adversos de la pandemia sobre la liquidez empresarial.

En esta edición de la encuesta, el BCE también incluyó una pregunta para conocer el impacto de las distintas medidas gubernamentales de apoyo a las empresas adoptadas como respuesta a la pandemia.

En el caso de España, un 31% de las pymes dijo haber accedido, en los últimos doce meses, a ayudas para aliviar los costes de personal, un 14% se benefició de recortes de impuestos y moratorias fiscales, y un 21% habrían recibido otro tipo de apoyos, como avales a los préstamos. En los tres casos, estos porcentajes se situaron por debajo de los reportados para el conjunto de la UEM (un 48%, un 25% y un 32%, respectivamente).

Entre el 71 y 87% que accedieron a esas ayudas piensa que habrían contribuido de forma relevante a cubrir sus necesidades de liquidez a corto plazo, pero el 63% cree que las medidas en vigor o previstas destinadas a reducir los riesgos de solvencia a medio plazo no tendrían un impacto relevante sobre la capacidad de devolución de sus deudas.

(SERVIMEDIA)
11 Jun 2021
ECR/gja