Perales se presentó en los Juegos Paralímpicos de Tokio 2020 tras lesionarse en un hombro izquierdo el pasado mes de mayo durante el Europeo celebrado en Funchal (Portugal), cuando tuvo una luxación por un espasmo muscular descargando mientras nadaba tras una prueba, lo que dificultó su preparación para la cita japonesa.

La nadadora aragonesa agrandó este lunes su leyenda con la plata en los 50 metros espalda de los Juegos Paralímpicos de Tokio 2020 y quiso este jueves sumar su 28ª medalla paralímpica en el relevo femenino de 4x100 estilos (34 puntos) junto con Nuria Marqués, Sarai Gascón e Isabel Yinghua Hernández.

Sin embargo, el cuarteto español terminó en la quinta posición con un tiempo de 5'04"78. Marqués acabó tercera el tramo de espalda, Gascón subió a la segunda plaza provisional con la braza, Hernández lideró la prueba en la mariposa y Perales completó la carrera y tocó la pared en la quinta plaza.

"El hombro está en las últimas. Era lo normal. La prueba de espalda me dejó muy tocada porque ahí lo di todo. A nivel médico, quizá hubo dudas de si nadaría, pero a nivel personal, ninguna", comentó Perales, antes de añadir que logró recuperarse para Tokio 2020 con el deseo de nadar la prueba de este jueves.

"Desde que me lesioné en Funchal sentí que le estaba fallando al equipo", apuntó, antes de señalar que tiene "pocas excusas" para entrenar y competir en los Juegos Paralímpicos de París 2024. "Igualar a Phelps es el objetivo", concluyó.