Así lo confesó en declaraciones a Servimedia previas al acto oficial de recepción a los últimos deportistas Ppralímpicos recién llegados de Tokio, en el que han participado más de un centenar de atletas, entre ellos varios medallistas, y que se ha celebrado en la Casa Paralímpica de España, ubicada en Madrid.
“No sé si me lo esperaba, porque yo iba con buenas marcas en las dos pruebas, pero, claro, luego tú, cuando estás ahí, no sabes, porque a nivel mundial las marcas de las otras atletas no aparecen”, agregó, la deportista, que acudía a Tokio “con unas expectativas altas en el 100, pero en 400 no lo sabía”.
“Al final, salí mucho mejor de lo que me esperaba y estoy super contenta y asimilándolo”, dijo, consciente de que el camino a Tokio “fue duro para todos, tanto deportistas como no deportistas” y de la suerte de haber podido “buscarse la vida”.
En este sentido, Iglesias se sintió “afortunada” por la “gran oportunidad” que tuvo al poder entrenar en su garaje, donde se montó un gimnasio “provisional” para hacer los entrenamientos “sin problemas”. “Entrenaba a la hora en la que no venía gente y mi madre controlaba a ver si venían coches o no”, agregó, convencida de que las competiciones en las que participó en los últimos meses “fueron pocas, pero salieron bien” y de que las preseas obtenidas en Tokio han sido “una recompensa” a su esfuerzo.
A su entender, el mensaje más importante que han lanzado los paralímpicos es la necesidad de “ser positivo”. “La pandemia nos ha fastidiado a todos y yo soy una de las afortunadas, he podido entrenar, no me puedo quejar porque hay gente que lo ha pasado muy mal y yo no, así que no tengo derecho ninguno a protestar”, resolvió.

La atleta expresó su convicción en que, a partir de ahora, todos los deportistas van a poder entrenar “en condiciones”, con el deseo de que la pandemia acabe y “nos deje respirar”.
NUEVOS RETOS
Preguntada por los nuevos retos a afrontar a partir de ahora, subrayó que en las próximas semanas se dedicará a descansar y, con posterioridad, a seguir compitiendo “como siempre”.
“No soy de ponerme retos. Sé que voy a seguir en el mundo del deporte y que voy a seguir teniendo el objetivo de tener unos buenos resultados, pero no me he puesto un reto más allá de entrenar y llegar al Mundial del año que viene lo mejor posible, sin lesiones”, apostilló, para asegurar que ella va “etapa por etapa”.
El acto oficial de recepción de la delegación española, que regresa de Tokio con 36 medallas: 9 de oro, 15 de plata y 12 de bronce, con un total de cinco más que en Río 2016, además de 131 diplomas paralímpicos, será presidido por el presidente del Comité Paralímpico Español, Miguel Carballeda y contará con la presencia de la presidenta de honor del Comité, la infanta Elena; el ministro de Cultura y Deporte, Miquel Iceta y la ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030, Ione Belarra.