El sindicato ha trasladado por carta al ministro de Trabajo e Inmigración en funciones, Valeriano Gómez, y a la titular de Sanidad, Política Social e Igualdad, Leire Pajín, también en funciones, su malestar y preocupación por una medida que el sindicato califica de "irresponsable".

Y es que, argumenta UGT, es "irresponsable" dejar sin sanidad a las personas más vulnerables, "máxime en la situación económica actual, donde más de un millón de hogares tienen a todos sus miembros en paro".

Ante esta situación, demanda una mayor coordinación entre las Administraciones Públicas para evitar vacíos de cobertura en la prestación sanitaria.

La Unión General de Trabajadores señala que la medida va en contra de la Ley General de Salud Pública, que recoge ya el derecho a la asistencia sanitaria pública de todos los ciudadanos, tras el acuerdo en la mesa de diálogo social, el derecho a la asistencia sanitaria pública de todos los ciudadanos mediante la universalización del Sistema Nacional de Salud (SNS).

Para el sindicato, la asistencia sanitaria es un "derecho constitucional y de justicia social", por lo que exige una tarjeta sanitaria única y universal "como mecanismo de acceso a los centros, servicios y prestaciones sanitarias de la Seguridad Social propias del Sistema Nacional de Salud público, equitativo y solidario".