Durante el debate sobre el proyecto de ley de los Presupuestos Generales del Estado 2010, Durán i Lleida dijo que “lo mejor de la propuesta del Gobierno ha sido retrasar hasta el 1 de julio” la aplicación del aumento del IVA, porque así habrá “margen de tiempo” para persuadirle “del error que comete” con dicha medida, que “castiga al consumo”.

“Desde hoy y hasta el 1 de julio de 2010 vamos a insistirle para que retrase y no aplique este aumento el año 2010, para que en ningún caso aumente el IVA, mientras nuestra economía no esté en un proceso de clara recuperación”, dijo.

El dirigente catalán reprochó que “mientras la economía creció, el Gobierno no tuvo la visión de futuro que le exigíamos para transformar las bases de nuestra economía hacia otro modelo más abierto y competitivo”.

Tras destacar que “ningún Estado europeo ha perdido tanto empleo como España en tan poco tiempo, casi ningún otro ha deteriorado tan rápidamente sus cuentas públicas”, Durán i Lleida afirmó que, a su juicio, “aumentar los impuestos en tiempos de crisis la agudizará y hundirá más la economía”.

Para CiU, la deducción de los 400 euros “en ningún caso” debería eliminarse para aquellas personas que perciban rentas inferiores a los 20.000 euros anuales. Asimismo, añadió que “subir impuestos en tiempos de crisis es una opción pesimista, es renunciar a la recuperación a corto y medio plazo”.

UNA BURLA DE AUSTERIDAD

Durán i Lleida señaló que “antes de subir impuestos es imprescindible recortar gastos” y pidió al Gobierno un compromiso “más drástico” con la austeridad, pues lo que “ha vendido” como tal “es una burla”.

“La austeridad no sólo requiere eliminar determinadas partidas presupuestarias, sino que principalmente necesita cambios en la estructura de funcionamiento de la Administración y en la organización de la propia Administración del Estado y del conjunto de las empresas públicas”, añadió.

A juicio de Durán i Lleida, “sin empleo no hay creación y distribución de riqueza posible” y “sin empleo las prestaciones por desempleo son insostenibles”. “El Gobierno debe ser consciente de que las prestaciones y subsidios por desempleo tienen el objetivo de ser temporales, pero tal como vamos se están convirtiendo en estructurales, en permanentes, y eso no es sostenible”, afirmó.

“Necesitamos una política económica capaz de volver a crear empleo, capaz de creer en el tejido productivo que tenemos, ya que los parados no quieren subsidios, quieren trabajo”, sentenció Durán i Lleida, quien insistió en que “es por la vía de la creación de empleo por donde el Estado debe equilibrar sus finanzas y por donde la sociedad puede ver de nuevo el optimismo”.