Según informa la ONCE, tanto el Orfeón madrileño como la Coral donostiarra están integrados en su mayoría por personas ciegas o con discapacidad visual y forman parte de las asociaciones culturales que apoya y acoge la organización en diferentes centros de todo el territorio nacional.

El Orfeón Fermín Gurbindo nació en Madrid en 1988 bajo la batuta de Carlos Gómez, su actual director, también ciego. Hoy en día cuenta con unos 50 componentes, más de la mitad con discapacidad visual. La formación participa en numerosos certámenes de toda España e incluso fuera de nuestras fronteras. Tiene editados dos CD con grabaciones de RTVE y disfruta de diversos premios obtenidos a lo largo de los años.

Por su parte, la Coral Alaia se fundó en 1991 en el seno de la ONCE en Gipuzkoa, bajo la dirección de Araceli Aguado. En la actualidad está formada por 37 vocalistas, la mayoría con discapacidad visual, dirigidos por Vineta Iglesiasa.

El grupo ha participado en el Certamen Internacional de Villancicos celebrado en Viena, en 1995, y ha interpretado conciertos en la Basílica de San Pedro del Vaticano y en la Escuela Filarmónica de Roma, entre otros enclaves.