Por ello, en declaraciones a la prensa tras reunirse con representantes de las asociaciones de autónomos ATA, UPA, OPA, Uatae y Ceat, Burgos pidió evitar “proyecciones alarmistas”.

Por otro lado, explicó que la nueva fórmula permitirá también que en el caso de que se tomen medidas que mejoren los ingresos o los gastos del sistema eso tenga una repercusión positiva en la revalorización de las pensiones.

“Es una fórmula que permite operar sobre sus componentes de forma que si los gobiernos toman decisiones que operen sobre los ingresos o sobre los gastos eso tiene una automática traducción sobre la revalorización”, afirmó.

En cuanto al Fondo de Reserva de la Seguridad Social explicó que pese a los cambios del factor de sostenibilidad y del método de revalorización va a seguir siendo un componente fundamental del sistema.

A este respecto, indicó que cuando los ingresos sean superiores al máximo de revalorización del IPC más un 0,25% todos los excedentes pasarán de forma automática al Fondo de Reserva.

Por todo ello, se mostró “convencido” de que el sistema dispondrá de recursos suficientes a medio y a largo plazo.

En esa línea, valoró que “es mejor operar con una forma que podamos cumplir que con una que tengamos que saltarnos” y reiteró que el sistema propuesto es “más justo, equilibrado y capaz de garantizar el futuro a medio y largo plazo”.

En relación con los autónomos, defendió que “son muy importantes para el sistema de la Seguridad Social” ya que representan más de 3 millones de cotizantes y 1,8 millones de pensionistas.

En representación de las organizaciones de autónomos, el presidente de ATA, Lorenzo Amor, explicitó a Burgos su agradecimiento por trasladarles la propuesta y aseguró que “aportaremos todos los aspectos que creamos importantes para fortalecer este debate y el consenso que siempre ha existido en esta materia”.