Los abetos navideños de plástico contaminan y consumen “mucha agua” antes de llegar a casa

- Los ecologistas proponen decorar las macetas que ya existan en el hogar

MADRID
SERVIMEDIA

Greenpeace y WWF aconsejan a los españoles no comprar árboles navideños artificiales para decorar sus viviendas esta Navidad porque, al ser de plástico en su mayoría, requieren de “mucha agua” y emiten CO2 durante su proceso de fabricación.

El responsable de Bosques y Clima de Greenpeace, Miguel Ángel Soto, ha hecho un llamamiento para que en estas fiestas no se compren más de estos artículos. “Si alguien lo tiene porque lo ha comprado o heredado que lo use, pero que no se compren más”, señaló.

En declaraciones a Servimedia, Soto afirmó que el debate “no es ya si árbol de plástico o árbol natural”, sino “si realmente se necesita seguir alimentando la cultura del ‘usar y tirar’”.

Aunque los árboles naturales que se compran en Navidad para adornar las casas son de vivero (con lo que “no hay impacto sobre los bosques”), Greenpeace apuesta por aprovechar las plantas de interior, los jardines comunes o las plantas de los “patios de vecinos”, que “pueden servir también perfectamente para decorar o ambientar las casas”. “La idea de comprar un árbol para luego tirarlo es un uso superfluo del que se puede prescindir”, concluyó.

Lourdes Hernández, de WWF, tampoco cree “que sea necesario que todos los hogares tengan un abeto de Navidad”, ya que “se puede decorar con ramas de bosque o de podas que se encuentren”.

En caso de comprar uno, Hernández piensa que “es mejor optar por uno natural” (“siembre que se garantice que procede de vivero controlado”), porque los de plástico “son muy contaminantes en su proceso de producción, requieren mucha agua y generan un residuo final no biodegradable”.

DOS MILLONES DE ÁRBOLES, A LA BASURA

Ecologistas en Acción también critica que los abetos se hayan convertido “en un objeto de consumo de usar y tirar”, que va “del vivero al vertedero” después de pasar las fiestas en casa.

Según estima la ONG, en España hay viveros “dedicados exclusivamente a la producción de árboles que van a la basura” (“alrededor de 2.000.000 al año”), en “un país erosionado y con graves riesgos de desertificación”.

Ecologistas en Acción alerta también de los “enormes impactos” que causan otros adornos navideños, como los acebos, “que han conducido a que se encuentren en grave peligro de desaparición”, y “lo mismo ocurre con los musgos”, que se usan para decorar belenes.

(SERVIMEDIA)
13 Dic 2009
LLM/jrv