Las organizaciones sindicales demandan al Gobierno la participación de los agentes sociales en el diseño de este plan, “especialmente por la situación de provisionalidad del Ejecutivo”.

Consideran que el PNR “debería reflejar las propuestas que hemos hecho llegar a todos los grupos parlamentarios”, que, entre otras cuestiones, incluyen “el fin de las políticas de austeridad fiscal y laboral que han agravado la crisis y aumentado el riesgo de deflación”.

En este sentido, defienden que la “prioridad absoluta” de las reformas que refleje el documento “debe centrarse en la lucha contra el desempleo, la pobreza y la desigualdad”.

También abogan por elaborar reformas que “relancen la inversión pública y productiva, impulsen la industria y la transición energética, y recuperen las inversiones en I+D+i y en infraestructuras sociales”, lo que permitiría “una senda de crecimiento socialmente sostenible”.