Seguridad vial

El 61% de las familias ignora que el asiento trasero central es el más seguro para la sillita infantil

- Según un estudio de la Fundación Mapfre y la Federación de Asociaciones de Matronas de España

MADRID
SERVIMEDIA

Seis de cada 10 familias españolas -concretamente, el 61,2%- desconocen que el asiento trasero central es el lugar del vehículo más seguro para colocar la sillita infantil y una de cada tres -un 34,3%- ignora que el respaldo debe colocarse en una posición intermedia entre horizontal y vertical cuando el bebé viaja mirando hacia atrás.

Así se desprende del informe ‘Seguridad vial infantil en el automóvil: ¿viajan nuestros hijos siempre seguros?’, elaborado por la Fundación Mapfre y la Federación de Asociaciones de Matronas de España (FAME), y dado a conocer este viernes.

El estudio se basa en un cuestionario contestado entre el 15 de julio y el 30 de septiembre de 2021 por 860 personas, con una media de edad de 38,5 años, en su mayoría madres y con 1,5 hijos de promedio, sobre todo de uno a cuatro años.

Una de las principales conclusiones es la percepción de seguridad que tienen los participantes respecto al lugar más seguro para ubicar la sillita infantil en el coche, ya que solo un 38,8% afirma que es el asiento trasero central, puesto que es la que más protección ofrece al menor de los impactos laterales, por lo que un 61,2% contestó erróneamente (un 18,8% el asiento trasero izquierdo; un 35,7% el asiento trasero derecho; un 6,1% cualquier asiento trasero, y un 0,6% el asiento delantero al lado del conductor).

No obstante, la mayor parte de los automóviles no dispone de anclajes Isofix en el asiento trasero central y sí en los laterales. En ese caso, la ubicación ideal sería el asiento trasero derecho si se va a utilizar el sistema Isofix, ya que permite el contacto visual con el niño y ofrece un acceso más seguro desde la acera para acceder a la sillita tanto para instalarla como para la entrada y salida del menor del vehículo, según la Fundación Mapfre.

ANTIGÜEDAD

Por otro lado, un 8,6% de las personas encuestadas no conoce la antigüedad del sistema de retención infantil; un 5,8% afirma que la sillita tiene más de seis años, y el 57,6% ignora con cuántos años debe renovarse este elemento de seguridad.

Dado que los sistemas de retención infantil están destinados a proteger a los niños en caso de colisión o frenada brusca, lo razonable, según la Fundación Mapfre, sería no utilizar el mismo dispositivo más de seis años, siempre priorizando las indicaciones del fabricante de la sillita.

Un 34,3% de las personas consultadas desconoce que el respaldo de la sillita debe colocarse en una posición intermedia -entre horizontal y vertical- cuando el bebé viaja mirando hacia atrás. De hecho, un 26,7% cree que debe ir completamente vertical en un ángulo de 90 grados y un 7,6%, que tiene que ir casi tumbado.

Un 41,2% cree erróneamente que la recomendación del uso del asiento alzador es hasta que el niño mida 135 centímetros, estatura que se corresponde con la obligatoriedad de su utilización, no con la recomendada, que es hasta los 150 centímetros o hasta que el cinturón se ajuste a las condiciones físicas del menor.

Según la Fundación Mapfre, esto puede dar a los padres una falsa sensación de seguridad al pensar que es recomendable, y no obligatorio, usar alzador si su hijo mide menos de 135 centímetros, con lo que podrían prescindir del dispositivo cuando en realidad en ese momento el uso de la sillita es obligatorio para evitar lesiones en caso de siniestro.

ASIENTO DELANTERO

Por otra parte, la mayoría de padres y madres (99,6%) reconoce la importancia de transportar a un recién nacido en un portabebés de seguridad mirando hacia atrás o en un capazo homologado para su uso en el coche.

Nueve de cada 10 sabe las ventajas del sistema Isofix, entre ellas que facilita la instalación del portabebés y la sillita, y aumenta la seguridad.

El 92% de los participantes conoce el momento que la normativa marca, aunque el recomendado es a partir de los cuatro años, en el que los niños pueden viajar mirando hacia delante (a partir de los 15 meses o 10 kilos), mientras que un 8% cree que puede ser en cualquier momento o cuando los padres lo consideren necesario (3% y 5%, respectivamente).

Casi la mitad de los padres y madres desconoce las tres excepciones en las que los menores pueden viajar con una sillita en el asiento delantero: cuando el vehículo no disponga de asientos traseros, si todos los asientos traseros están ocupados por otros menores con un sistema de retención infantil o si no se pueden instalar sillitas en los asientos traseros.

NORMATIVA

La Ley de Tráfico recoge tanto la obligatoriedad de utilizar sistemas de retención infantil como hacerlo correctamente. Todos los menores de edad cuya altura sea igual o inferior a 1,35 tienen que utilizar uno, y, además, deben ir en los asientos traseros del vehículo, salvo que estén ocupadas todas las plazas traseras por menores, que el vehículo no disponga de plazas traseras o que no se puedan instalar la sillita en la parte trasera.

Una instalación incorrecta o la no utilización de los sistemas de retención infantil supone una infracción grave, lo que acarrea una multa de 200 euros y la retirada de cuatro puntos del carné de conducir.

En 2020 fallecieron 17 niños en siniestros viales en España, de los cuales siete eran peatones, cuatro conductores y seis pasajeros. Según el medio de desplazamiento, siete iban a pie, dos en bicicleta, uno en ciclomotor, uno en moto, cinco en coche y uno en autocaravana. Uno de los menores fallecidos en bicicleta no utilizaba casco, así como otros dos no llevaban el cinturón de seguridad o sistema de retención infantil.

(SERVIMEDIA)
20 Mayo 2022
MGR/clc