La agricultura intensiva frena la mejora de las poblaciones de aves agrícolas en Europa

- España ha perdido 64 millones de ejemplares en 20 años, según SEO/BirdLife

MADRID
SERVIMEDIA

La intensificación agraria afecta negativamente a las aves agrícolas y esta situación puede revertirse si las políticas agraria y ambiental de la UE se actualizan y se orientan hacia la protección de la biodiversidad, según un estudio publicado en la revista ‘Conservation Letters’ por un grupo de investigadores, algunos de ellos pertenecientes a BirdLife Europa.

De hecho, según el programa ‘Sacre’ de SEO/BirdLife, España ha perdido más de 64 millones de ejemplares en los últimos 20 años. Esta organización está presente en Fruit Attraction, una feria internacional del sector hortofrutícola que se celebra desde este miércoles hasta el próximo viernes en Ifema (Madrid), en la que ofrecerá su propuesta de una agricultura sostenible, algo que lleva años demostrando con el cultivo del arroz ecológico en la Reserva Ornitológica de Riet Vell (Tarragona).

El estudio analiza cómo han afectado a los cambios poblacionales de las aves los programas agroambientales establecidos por la Política Agraria Común (PAC), así como la declaración de las Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPA) y la aplicación anexo I de la Directiva de Aves.

Los investigadores usaron datos de seguimiento de 39 especies de aves agrícolas desde 1981 hasta 2012 a escala comunitaria y llegaron a la conclusión de que la intensificación agraria ha tenido un efecto negativo en las aves de estos ambientes.

Los expertos contataron que tanto las áreas protegidas de la Red Natura 2000 como los programas agroambientales de la UE tienen un impacto positivo en las tendencias de las aves agrícolas, pero estos beneficios no son suficientes para compensar el efecto negativo de la agricultura intensiva.

“Este nuevo estudio confirma los resultados de la reciente revisión por parte de la Comisión Europea de las directivas de Aves y de Hábitats. La política ambiental de la UE funciona cuando se implementa, pero no puede revertir el colapso de la biodiversidad mientras es socavada por políticas perversas como la Política Agraria Común”, apuntó Ariel Brunner, responsable de Políticas de BirdLife Europa y Asia Central.

Según Inés Jordana, técnico de Agricultura y Desarrollo Rural de SEO/BirdLife, “la reciente conferencia celebrada en la ciudad de Cork (Irlanda) confirma que 20 años después de la firma de la Declaración de Cork sobre Desarrollo Rural, las políticas actuales no están logrando la viabilidad de la actividad agraria y el desarrollo sostenible de las zonas rurales”.

Por ello, bajo el título ‘Una vida mejor en las zonas rurales’, en Cork se recogieron las 10 prioridades sobre las que la UE y los gobiernos deberían centrar sus esfuerzos si se quieren hacer frente a los retos a los que se enfrenta el territorio: promover la prosperidad rural, fortalecer las cadenas de valor rurales, invertir en viabilidad y vitalidad rural, preservar el entorno de las zonas rurales, gestionar los recursos naturales, fomentar la acción por el clima, acelerar el conocimiento y la innovación, mejorar la gobernanza rural, avanzar en políticas simplificadoras y mejorar el rendimiento y la contabilidad.

(SERVIMEDIA)
05 Oct 2016
MGR/caa