En el envase de dichos productos se detallan las partes que se biodegradan y pueden utilizarse como abono orgánico.

Cada vez son más las empresas estadounidenses que fabrican material escolar y de oficina biodegradable.

Entre ellas C-Line Products, que ya lleva varios años comercializando carpetas y estuches para bolígrafos biodegradables.

Marc Colavitti, presidente de I+D de Paper Mate, prevé que durante los próximos 10 años las empresas de su sector harán más respetuosos del medioambiente entre el 25% y el 30% de sus productos.