“Celebramos que se vaya imponiendo la sensatez. Ya dijimos en campaña que ni regalos ni chantajes. Sólo medidas para el comenzar el cambio de rumbo, y presencia en los gobiernos para garantizarlo. Es un acuerdo razonable”, indicó Abascal en sus redes sociales tras hacerse público el acuerdo.

Ayer, el propio Abascal comentó que las negociaciones en esta región eran “muy complicadas” porque el PP “empezó con muy mal pie” diciendo que “respetaría la lista más votada”, pero como fue la socialista “tuvo que desdecirse inmediatamente”. Además, cree que “cometió el error de decir que Vox tenía la obligación de entregarle gratis los votos a una candidata” que les “había demonizado”.

Sin embargo, esta misma mañana Vox explicó que ha llegado con el PP a un acuerdo programático que incluye “60 medidas centradas en garantizar un gobierno del cambio que reviertan las consecuencias de la inercia política del PSOE en los últimos años”. Las medidas acordadas están centradas “en las prioridades de las familias extremeñas, y en combatir el paro, la pobreza, la falta de oportunidades y la despoblación”.

Con este acuerdo, Vox consigue entrar en el Gobierno de Extremadura y ostentará la Consejería de Gestión Forestal y Mundo Rural, pese a los desencuentros entre ambas formaciones. La líder del PP en esta comunidad, María Guardiola, llegó a decir que no podía dejar entrar en el ejecutivo a los que “niegan la violencia machista”.