La organización detalló que su intervención se mantiene de forma permanente en localidades como Alfafar, Catarroja y Sedaví, donde la dana provocó graves consecuencias económicas y sociales. “Tras la emergencia, era necesario permanecer donde más se necesitaba y apoyar en el proceso de recuperación”, estimó la delegada en la región, Dolores Marco.

Señaló además que "las secuelas de la dana afectan especialmente a quienes ya estaban en riesgo de exclusión" antes de la catástrofe. Por ello, la prioridad es facilitar el acceso al empleo y la formación en las zonas más perjudicadas, poniendo “a su servicio toda nuestra experiencia técnica en España”.

La responsable subrayó que la entidad cumple su compromiso de acompañar a los damnificados hasta lograr una recuperación total, ampliando su labor más allá de la ayuda humanitaria inicial.

BALANCE DE LA EMERGENCIA

La organización realizó un balance de su actuación tras la dana, que incluyó el reparto de más de 3.000 raciones de comida caliente y material de limpieza en los primeros días. Además, movilizó maquinaria pesada para limpiar calles y bajos durante dos meses y distribuyó Tarjetas de Ayuda Solidaria por valor de 1.000 euros a familias afectadas.

Esta ayuda económica directa permitió atender necesidades básicas mientras llegaban otras ayudas oficiales. Ahora, Acción contra el Hambre amplía su intervención con programas como 'Vives Emplea Saludable' y 'Escuelas de Empleo Vives Aprende'.

También ha presentado propuestas como 'Barrios que alimentan' y 'Nutriendo Lazos', que buscan reforzar la seguridad alimentaria en las zonas damnificadas y suponen una inversión social cercana a 900.000 euros si se aprueban.

El director de Ingeniería Técnica y Acción Social, Luis González, explicó que el trabajo se dividió en cuatro fases: la respuesta a la emergencia, la limpieza de calles y bajos, la entrega rápida de tarjetas eliminando la burocracia y, finalmente, la puesta en marcha de itinerarios de empleo.

“Queremos seguir fortaleciendo la autonomía económica de las personas afectadas para lograr una recuperación duradera”, declaró. El equipo de emergencia se activó menos de 24 horas después de la dana, evaluando necesidades en varios municipios.

TESTIMONIOS DE BENEFICIARIOS

“No tenía ningún ingreso, porque la dana se lo había llevado todo. No había comercios, no había nada, y yo me quedé sin empleo”, relató una de las receptoras de las Tarjetas de Ayuda Solidaria.

Otra beneficiaria, Verónica, señaló que la ayuda fue fundamental porque “llegó cuando las otras ayudas aún no habían venido” y permitió cubrir necesidades inmediatas para comenzar de nuevo.

Superada la fase más crítica, Acción contra el Hambre decidió continuar su labor en los municipios afectados, pasando de la ayuda humanitaria a programas de empleabilidad dirigidos a quienes perdieron su trabajo.