Los fabricantes están autorizados a glasear, es decir, a recubrir las gambas con hielo para conservarlas mejor, siempre que el peso neto declarado sea correcto.

Pues bien, una marca (Clavo) no indica el peso neto, obligatorio, y otras 4sí lo indican, pero es superior al real. Así, Froxá declara 740 gramos netos de gambas y contiene 425; Delfín anuncia 200 y ofrece 154; Joyamar asegura 400 gramos y tiene 335, y Costa Fish dice incluir 160 gramos y proporciona sólo la mitad.

El resultado, además del fraude, es que las marcas que cumplen la ley salen perjudicadas frente al consumidor, ya que los precios engañan.

Pescanova, Frudesa y Compesca, que no engañan en su peso neto, parecen más caras que Froxá o Costa Fish, pero en realida es al contrario. En precio real de Pescanova, por ejemplo, son 2.375 pesetas/kilo, mientras que el de Froxá son 3.527 pesetas/kilo y el de Costa Fish, 3.333 pesetas/kilo.

Otro aspecto es el tamaño de las gambas y su porcentaje de piezas rotas. Las gambas más grandes son las de Clavo, con 132 unidades por kilo, mientras que las más pequeñas son las de Froxá (908 gambas/kilo) y Costa Fish (874 unidades/kilo). En cuanto al porcentaje de gambas rotas, en Costa Fish alcanzaba el 11%; en Froxá, Joyamar y Pscanova, entre un 4% y un 5%, y el resto, menos del 2%.

En la cata, las que mejor puntuación obtuvieron fueron Pescanova (7 puntos), Frudesa y Clavo (con 6). Las otras 5 no aprobaron.

"Consumer" recuerda que las gambas aportan proteínas de buena calidad biológica y cantidades importantes de calcio y yodo. Sin embargo, aunque sólo presentan un 1,5% de grasa y son poco calóricas, tienen mucho colesterol.