Así lo afirmó en declaraciones a los medios de comunicación en el parque de El Retiro, donde lamentó que ese fuese el mensaje que transmitiese Sánchez a los españoles, el de que “su política para España a lo largo de los próximos cuatro años se llama Óscar y se apellida Puente”.

Por tanto, continuó el regidor madrileño, se traducirá en “la bronca, la confrontación, la crispación, los bloques, las trincheras y el enfrentamiento”.

Almeida criticó que, “en vez de tener la gallardía de poder defender su posición y tener la valentía de dar la cara ante todos los españoles, envió al Luis Rubiales de la política por delante, porque ese es el mensaje que quería transmitir a los españoles”.

“No le importamos absolutamente nada y le damos igual”, porque “sólo quiere ser presidente a toda costa y para qué va a dar la cara delante de los representantes de todos los españoles”, se preguntó.

Por ello, el alcalde de la capital consideró que no es que ayer Feijóo se consolidara como líder del Partido Popular, sino que “se consolidó como la única esperanza que tiene España frente al sanchismo, como la única esperanza que tiene España frente al independentismo, como la única esperanza que tiene España frente a la política del odio del rencor y de la crispación”.

Por tanto, continuó, “como la única alternativa seria para que la España constitucional en la que nos encontramos una amplísima mayoría de españoles podamos seguir viviendo en paz, en convivencia y en concordia”.

De este modo, “eso es lo que se consolidó ayer con Alberto Núñez Feijóo”, porque “como líder del Partido Popular no había ningún debate al respecto”. “Fue Alberto Núñez Feijóo o Pedro Sánchez y su guiñol de serie B, Óscar Puente”.

¿FUE COBARDE SÁNCHEZ?

Preguntado por si considera al igual que numerosos diputados del Partido Popular que llamaron cobarde a Sánchez por no intervenir, Almeida respondió que al presidente del Gobierno “se le acaban los adjetivos”. Por ello, “es mejor llamarle Pedro Sánchez, porque con eso lo hemos resumido absolutamente todo”.

Por ello, el alcalde incidió en que “cuando uno dice quién es Pedro Sánchez, ya sabe cuáles son los valores que representa, que no es más que pensar en sí mismo” y se mostró convencido de que “algún día el Partido Socialista se preguntará cómo pudimos someternos a este personaje de la forma que nos sometimos y que dentro de un tiempo en el Partido Socialista hará autocrítica y dirán cómo nos pudimos someter al autoritarismo de una persona de estas características personales y políticas que reúne Pedro Sánchez”.

Por último, afirmó que él no va a calificar a Pedro Sánchez desde el punto de vista de si es un cobarde o no es un cobarde, pero apuntó que “todos los españoles vieron que no quiso salir a la tribuna”. “Pedro Sánchez es Pedro Sánchez y, con eso, ya hemos valorado todo del personaje”, concluyó el primer edil madrileño.