Así se refleja en el informe anual de remuneraciones del consejo de Mapfre remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

Huertas mantuvo el sueldo en 886.000 euros y la remuneración variable a corto plazo se situó en 860.000 euros, a lo que se suman 87.000 euros por otros conceptos. Sumó 1,83 millones en 2023 por estos tres conceptos, un 13,4% más que en 2022.

A esta cantidad, percibida en metálico, se suman 601.000 euros de remuneración por sistemas de ahorro y 30.000 euros por otros conceptos, lo que totaliza los 2,46 millones de remuneración en 2023.

Por su parte, el vicepresidente ejecutivo, Ignacio Baeza, anotó una retribución de 2,79 millones, un 77,7% más que en 2022, recogiendo el impacto de su jubilación anunciada el año pasado. Baeza percibió 45.000 euros como indemnización, 904.000 euros de sueldo, 547.000 por retribución variable a corto plazo y 21.000 euros por otros conceptos, lo que totalizó 1,52 millones, frente al millón de 2022. A esta remuneración en metálico se suman 1,25 millones en sistemas de ahorro y 23.000 euros por otros conceptos, totalizando los 2,79 millones. A Baeza se le incrementó la retribución fija por haber cumplido 60 años, lo que implica un cambio de condiciones en su contrato y la consolidación de las aportaciones a planes de pensiones de 1,25 millones frente a 510.000 de 2022.

Huertas y Baeza fueron los consejeros que más percibieron. En conjunto, el consejo de Mapfre registró una retribución de 10,48 millones, un 22,9% más que en 2022, recogiendo el impacto del retiro de Baeza. Si se descuenta, el incremento sería del 10,8%. En el caso de los empleados, la retribución total de toda la plantilla del grupo, incluyendo los beneficios sociales, creció un 8,51%.