Presupuestos

Las aportaciones del Estado a la Seguridad Social se elevan un 7,2% y los ingresos por cotizaciones subirán un 11,5%

-Los ingresos se verán impactados por “la elevación de las bases máximas de cotización y por el actual marco de crecimiento económico”

MADRID
SERVIMEDIA

Las aportaciones del Estado al presupuesto de la Seguridad Social ascenderán en 2023 a 38.904 millones de euros, lo que representa un aumento del 7,2% respecto a lo presupuestado en 2022, según el proyecto de Presupuestos Generales del Estado (PGE) que presentó este jueves en el Congreso de los Diputados la ministra de Hacienda, María Jesús Montero.

El presupuesto recoge que dentro de las aportaciones del Estado destaca, por su cuantía, las transferencias del Estado a la Seguridad Social en cumplimiento de la recomendación primera del Pacto de Toledo de 2020 por importe de 19.888 millones de euros, 1.492 millones más que en el Presupuesto 2022, con el objeto de “garantizar la sostenibilidad del Sistema a medio y largo plazo”.

Además de las transferencias para la financiación de la prestación contributiva de nacimiento y cuidado de menor y para la financiación de las reducciones en la cotización a la Seguridad Social, que ya se contemplaban en el Presupuesto para 2022, se incluye por segundo año la integración de lagunas en las carreras de cotización; los complementos de pensiones contributivas que se conceden a los progenitores que hayan tenido uno o más hijos o hijas y que sean beneficiarios de una pensión contributiva de jubilación, de incapacidad permanente o de viudedad, debido a la incidencia de la brecha de género; la jubilación anticipada, que en determinados supuestos no se ve penalizado el importe de la prestación; las pensiones en favor de familiares, que tienen como finalidad proteger una situación de necesidad económica ocasionada por un fallecimiento; determinadas prestaciones contributivas o su importe, que están condicionados a límites de ingresos o a la obtención de rentas del trabajo, y una dotación para otros conceptos.

También cabe destacar, por su cuantía, la transferencia destinada a la cobertura de los complementos para pensiones mínimas con una dotación para 2023 de 7.261 millones.

Para la atención a la dependencia el Estado aporta 3.522 millones, más que en 2022, de los que 2.446 millones corresponden a la financiación del mínimo garantizado por el Estado, 185 millones a la financiación por el Estado de las cuotas sociales de cuidadores de personas en situación de dependencia y 783 millones para el nivel convenido. Asimismo, se dotan 102 millones de euros para financiar gastos corrientes en materia de dependencia y 6 millones para operaciones de capital.

La transferencia del Estado para financiar el Ingreso Mínimo Vital (IMV) asciende a 3.097 millones de euros, ligeramente por encima del presupuesto de este año.

Por otra parte, la transferencia para atender las pensiones no contributivas se eleva hasta 3.003 millones, en tanto que la transferencia para protección familiar se dota con en 1.339 millones de euros.

La aportación del Estado para financiar las pensiones no contributivas de la Seguridad Social cuenta con un crédito de 3.003 millones de euros (incluido País Vasco y Navarra). Este crédito permitirá atender el coste derivado de la variación del colectivo y del incremento de estas pensiones en el porcentaje equivalente al valor medio de las tasas de variación interanual expresadas en tanto por ciento del Índice de Precios al Consumo (IPC) de los 12 meses previos a diciembre de 2022.

El Estado disminuye levemente para 2023 las dotaciones para la transferencia a la Seguridad Social para financiar las prestaciones no contributivas de protección a la familia, ascendiendo a 1.339 millones, al haber quedado incluidos dentro del campo de aplicación del IMV las familias con hijos menores de dieciocho años sin discapacidad a cargo de los beneficiarios.

INGRESOS POR COTIZACIONES

Los ingresos no financieros de la Seguridad Social previstos para el año que viene ascienden a 192.102 millones de euros. de euros, un 10,6% más.

La principal fuente de financiación son las cotizaciones sociales, con un volumen para 2023 de 152.075 millones, con un crecimiento sobre el ejercicio anterior de un 11,5%, “lo que permite financiar un 74,5% del Presupuesto total”.

El Gobierno explica en el proyecto que el incremento de los ingresos por cotizaciones se ve influido por “la elevación de las bases máximas de cotización y por el actual marco de crecimiento económico”.

Para el ejercicio 2023 los ingresos por cotizaciones de empresas y trabajadores ocupados crecen un 12,6%, hasta los 143.261 millones. Las cotizaciones de desempleados y bonificaciones sociales que aporta el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE), así como las de los beneficiarios de la prestación por cese de actividad, ascienden a 8.427 millones de euros, lo que supone un descenso del 3,7% con respecto al ejercicio anterior “como consecuencia de la evolución del empleo para 2023”. Las cotizaciones por cese de actividad de trabajadores autónomos ocupados se cuantifican en 386 millones de euros, lo que supone un crecimiento del 5,6%.

Como novedad, el 1 de enero de 2023 entra en vigor el nuevo sistema de cotización de autónomos en función de sus rendimientos netos. Tendrá un despliegue progresivo a lo largo de los próximos tres años y establece 15 tramos de cotización. El presupuesto contempla que el sistema de autónomos aporte 12.038 millones en cotizaciones.

Después de las cotizaciones, las citadas aportaciones del Estado constituyen el concepto de mayor peso relativo en la financiación del Presupuesto no financiero de la Seguridad Social.

SUBIDA DE LOS GASTOS UN 10,8%

El Presupuesto consolidado no financiero de la Seguridad Social para el año 2023 alcanza la cifra de 199.301 millones, con un crecimiento del 10,8% sobre 2022.

El capítulo más importante corresponde a las transferencias corrientes, absorbiendo el 95,2% del total del Presupuesto. Se integran en este capítulo, fundamentalmente, las prestaciones cuya finalidad es prever, reparar o compensar los gastos derivados del acaecimiento de ciertas contingencias, como son las pensiones de carácter contributivo y no contributivo, la incapacidad temporal, las prestaciones por nacimiento y cuidado de menor, el riesgo durante el embarazo, la protección familiar, el cese de actividad de los trabajadores autónomos, el ingreso mínimo vital y otras prestaciones económicas.

Las pensiones contributivas tienen consignado un crédito para 2023 de 166.777 millones, un 11,2% más que en 2022, “estimado en función del incremento del colectivo de pensionistas, de la variación de la pensión media y de su revalorización”.

El Ejecutivo destaca en el proyecto que las pensiones contributivas experimentarán en 2023 “un incremento porcentual igual al valor medio de las tasas de variación interanual expresadas en tanto por ciento del IPC de los 12 meses previos a diciembre de 2022”, que estima en alrededor del 8,5%.

Las pensiones no contributivas de la Seguridad Social figuran en el Presupuesto del Imserso con un crédito de 2.803 millones de euros (excluido País Vasco y Navarra).

(SERVIMEDIA)
06 Oct 2022
MMR/gja