En su comparecencia ante la comisión del Congreso de los Diputados que investiga esa supuesta operación, lamentó que los dirigentes del Gobierno del PP que fueron "tan valientes" de organizar operaciones que consideraron "patrióticas" pese a ser "ilegales, ilegítimas e inmorales", no tengan "un poco de gallardía, un poco de coraje, para explicar por qué lo hicieron".

Lo dijo después de que horas la exvicepresidenta del Gobierno Soraya Sáenz de Santamaría negara en esa misma comisión la existencia de esa supuesta operación.

Artur Mas anunció por ello una "querella criminal contra todas aquellas personas que en ese momento, en aquellos años, causaron tal daño en nuestro sistema democrático" y del que algunos "salimos perjudicados", aunque eso no es "lo mas importante". "Lo importante es que la democracia española, como consecuencia de la 'operación Cataluña', como consecuencia del Pegasus, del espionaje masivo, quedó lesionada".

Ante esa evidencia, argumentó, "no sólo tengo derecho a presentar esa querella, sino que tengo la obligación política" de hacerlo. "Que cada uno ponga su granito de arena para intentar mejorar el presente y el futuro de nuestra democracia", reclamó.