En la elaboración del calendario han participado unas 50 personas y tendrá una tirada de 2.300 ejemplares, bajo el lema ‘La película de nuestras vidas’. Se trata de una “maravilla” de calendario, que pretende visibilizar al colectivo a través de una temática muy acertada, como es el caso del cine, más si cabe en un año en el que Valladolid acogerá la gala de los Goya, afirmó el presidente de la Diputación de Valladolid, Conrado Íscar en la presentación del mismo.

Cuesta cinco euros y se pretende que con lo recaudado se logre impulsar la autonomía personal a partir de la financiación de las prestaciones y atenciones que lleva a cabo la asociación, que apuesta por servicios de atención temprana, de logopedia, de estimulación cognitiva, de habilitación psicosocial o de apoyo a las familias.

Íscar dejó claro que desde la Diputación “siempre se pone en valor el trabajo que se lleva a cabo desde el Tercer Sector”, dado que acciones de este tipo son importantes para visibilizar la labor que se realiza desde las entidades y que, en ocasiones, las “administraciones no llegan a cubrir dichas necesidades”.

En este sentido, el fotógrafo, Dani Mantis, quien lleva colaborando en el proyecto diez años, señaló que este calendario se conforma por “imágenes cautivadoras”, que se erigen como el “testimonio del poder de la colaboración y la solidaridad”.

De esa forma, cada página no solo representa a las estrellas que protagonizan el calendario, sino al resto de patrocinadores y colaboradores. “Juntos estamos construyendo un futuro más inclusivo para todos”, aseguró.

El calendario podrá adquirirse en la sede de la Asociación y en el estudio de Dani Mantis y su objetivo principal es la “construcción de un futuro mejor”, señaló el presidente de la Asociación Síndrome de Down, Manuel Velázquez.

Se trata de un calendario que escenifica el “poder de la colaboración y del apoyo de las familias” para así fomentar la inclusión y mostrar a las personas con síndrome de Down como “verdaderas estrellas”, porque es necesario “derribar estereotipos y demostrar que no se está ante una enfermedad, sino una condición”. Y es que, “todos tenemos un papel importante en la sociedad, independientemente de las habilidades y capacidades”, aseveró.