La "relevancia simbólica" de esta pieza textil y su delicado estado de conservación hacían necesaria la recuperación de la misma mediante un exhaustivo trabajo de intervención que ha tenido una duración de cinco meses y un coste de 12.067 euros, según informó hoy el Gobierno que preside Manuel Chaves.

Un examen preliminar determinó el estado de la bandera, que mostraba fragilidad en las fibras textiles y numerosos desgastes y desgarros, así como manchas y suciedad generalizada.

Los trabajos de tratamiento se han basado fundamentalmente en su limpieza, en la eliminación de intervenciones anteriores como la presencia de zurcidos que estaban provocando tensiones en la tela con riesgos de romperla y en la consolidación general del tejido mediante el empleo de hilos de seda.

Aunque tradicionalmente se ha venido insistiendo en que el diseño de esta enseña se aprobó en la Asamblea de Ronda de 1918, algunos historiadores rechazan esta hipótesis asegurando que en las actas de esta reunión nada se indica sobre la bandera y otros símbolos y que la votación acerca de los mismos debió corresponder a la Asamblea Andalucista celebrada en Córdoba en 1919. Esta pieza, en concreto, fue la que presidió la Asamblea de Córdoba de 1933.

En diciembre de 2001, las hijas de Blas Infante donaron a la Junta de Andalucía los derechos de propiedad intelectual sobre la Bandera, el Escudo y el Himno andaluces, una donación de "extraordinaria importancia", según la Junta, debido al relevante papel que estos símbolos tienen en la historia reciente de esta comunidad autónoma.