Según la información remitida por Repsol a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), el resultado ajustado, que mide específicamente el funcionamiento de los negocios, sumó 2.173 millones de euros, un 19% menos que un año antes con mejoras en todas las divisiones.

Por su parte, el beneficio bruto de explotación (Ebitda) alcanzó los 5.313 millones de euros, un 9,9% menos que un año antes, con una caída del 6,6% en términos ajustados. Además, las ventas de la compañía se redujeron un 5%, hasta los 42.836 millones de euros, y la deuda neta se elevó a 6.890 millones, un 24,5% más. Las inversiones se redujeron un 18,7%, hasta 3.500 millones.

Repsol destaca que estos resultados se consiguieron en un entorno marcado por la continua volatilidad en los mercados, la incertidumbre geopolítica y las preocupaciones por la sobreoferta de petróleo. El resultado ajustado del negocio de Exploración y Producción ( Upstream) alcanzó 1.214 millones de euros entre enero y septiembre, un 5% más que en el mismo período de 2024, debido a los mayores precios del gas y a los menores costes operativos.

El área Industrial obtuvo un resultado ajustado de 545 millones, un 54,7% menos que hace un año, pero con un crecimiento del 70,3% en el tercer trimestre, que refleja la normalización de la actividad tras el apagón en España y Portugal, lo que ha permitido capturar mayores márgenes de refino.

Por su parte, el área Cliente mantuvo su tendencia de crecimiento, con un incremento del 21,3%, hasta 599 millones, y Generación Baja en Carbono obtuvo un resultado ajustado de 43 millones de euros, frente a los 12 millones perdidos en 2024.

Alineado con la estrategia de la compañía, Repsol ha sumado 157.000 nuevos clientes a su cartera de electricidad y gas en España y Portugal en el último trimestre, superando los 2,9 millones y con la previsión de alcanzar 3 millones de clientes antes de final de año.

Repsol garantiza una sólida remuneración al accionista, en línea con su plan estratégico. En 2025, la compañía prevé distribuir entre el 30%- 35% del flujo de caja de las operaciones a remunerar al accionista, en el rango alto del compromiso adquirido para el periodo 2024-2027.

En julio, Repsol distribuyó un dividendo bruto en efectivo de 0,50 euros por acción, que, sumado a los 0,475 euros brutos pagados en enero, asciende el dividendo total en efectivo para 2025 a 0,975 euros brutos por acción, un 8,3% más que en el ejercicio anterior.

Además, en la Junta General de Accionistas se aprobó la distribución de un dividendo adicional de 0,50 euros brutos por acción, que se abonará en enero de 2026. Este dividendo en efectivo se completa con recompras de acciones por un importe total de 700 millones de euros en 2025, con el objetivo de reducir capital. En 2026, tras las reducciones de capital llevadas a cabo en 2025, la compañía prevé distribuir un dividendo bruto que superará el euro por acción.