A través de un comunicado, Bonet consideró que la manifestación fue "claramente una actuación partidista, en la que se ha utilizado el nombre de las víctimas del terrorismo para hacer política de venganza tras las manifestaciones contra la guerra de IraQ y por resentimiento después de la derrota electoral del PP".

El portavoz de la Entesa, que agrupa a PSC, ERC e IC-V, reiteró el apoyo de su grupo a la política antiterrorista del Gobierno, "fundamentalmente porque más del 60 por ciento de los diputados del Congreso apoyó su propuesta para desencallar la situación, y la legitimidad del Partido Popular, en minoría, es muy dudosa".