Borrell calificó los veinte años transcurridos desde la aprobación de la Constitución como el periodo más fecundo de los dos últimos siglos, en el que se han resuelto problemas como el militar y el religioso o las seculares dificultades de asentar un sistema democrático basado en las libertades, y el litigio planteado por la existencia de nacionaldades históricas.

Tras señalar que "curiosamente" ahora "hay temas constitucionales que se ponen en cuestión, con excesiva frivolidad", Borrell señaló: "Para mí España nace con la Constitución".

En este sentido, explicó que la España actual "resulta de un pacto de sus gentes y sus pueblos. La Constitución es algo más que un documento constituyente, es un pacto constitutivo".

Consideró una obviedad decir que la Constitución se puede modificar. "Por supuesto que la Constitución no son las tabls de la Ley", dijo antes de señalar que para reformarla se deben dar dos circunstancias: "que hayan cambiado sustantivamente elementos definitorios del momento histórico del 78 y, segundo, que se puedan reunir en torno a los cambios un consenso "por lo menos mayor que el que se provocó en el 78".

Por ello, agregó "no tendría mucho sentido hacer modificaciones para satisfacer a unas minorías, por muy conscientes y sensibles que sean las modificaciones que proponen, si eso no reuniese un consenso como mmino mayor que el que reunió en el 78".

También propugnó separar cualquier debate sobre la reforma de la Constitución del esfuerzo para conseguir la paz en el País Vasco.

DEBATE AUTONOMICO

Borrell precisó que los socialistas quieren que el debate autonómico en el Senado que reclaman "no tenga nada que ver con la actual tregua de ETA", pero argumentó en favor de celebrarlo porque "están puestos sobre la mesa, por unos y por otros, suficientes elementos que hoy más que nunca aconsejan que este deate se produzca y lo hacen necesario".

Agregó que entiende que el Gobierno no quiera hacerlo. "No quiere porque no puede, porque es prisionero de sus pactos con partidos nacionalistas que, de producirse un debate, quedarían seguramente puestos en evidencia".

En este sentido, ironizó que esos acuerdos "los más transparentes de la Historia de España, según dijo Aznar, no soportan un debate público en el Senado".

Anunció que llevará esa cuestión al Congreso, para que se "puedan debatir a dónde os conducen las posiciones de unos y de otros", pero aseguró que eso no tiene nada que ver con el uso partidario de la tregua ni de las ocasiones de paz que haya. "No queremos ganar un solo voto", dijo, "si es a costa de retrasar un solo segundo la resolución de la paz". "Nadie debe mezclar el proceso de paz con el debate territorial", afirmó.

No obstante, señaló que tampoco hay que esconderse detrás de la tregua para negar un debate sobre la estructura política del Estado, "que hace falta hoy más quenunca, porque hoy más que nunca esta estructura política está puesta en cuestión, precisamente por los partidos políticos que mantienen al Gobierno actual".

Por ello, agregó que el Gobierno no puede mirar para otro lado mientras se diluyen las bases del consenso constitucional y la mayoría que le apoya "no es ya una mayoría para la gobernabilidad de España, sino una mayoría que apunta a elementos que rompen el consenso del 78".

Señaló que "hoy la derecha se ha quedado sin modelo de España", porqu el que tenía, "excluyente de la diversidad y centralista, no ha soportado el choque de las exigencias de pactos parlamentarios con los nacionalistas".

A su juicio, "España no puede ser el resultado incierto y deformado de los trapicheos que permiten mantenerse en el Gobierno según las coyunturas parlamentarias".

FEDERALISMO

Tras recordar el ofrecimiento de los socialistas a todas las fuerzas políticas para realizar un diálogo "sereno y riguroso" sobre la vertebración territorial, expuso las meidas de los socialistas para impulsar el desarrollo autonómico.

Esas propuestas contemplan completar los traspasos y culminar así los estatutos estabilizando el modelo de reparto competencial; renegociar la financiación autonómica recuperando el consenso; reformar el Senado para convertirlo en una auténtica cámara territorial; mejorar la cooperación entre comunidades autónomas y entre éstas y el Gobierno central, incluyendo la participación de las comunidades en las políticas de la Unión Europea, e imulsar una profunda reforma local que aumente las competencias y recursos de los municipios.

En este sentido, criticó que el Gobierno ha sido incapaz de responder a este ofrecimiento, porque, "prisionero de su pacto con los nacionalistas y carente de modelo de país, es incapaz de aceptar un diálogo sobre algo tan importante", dijo, antes de reafirmar que "los temas de Estado deben ser espacio de acuerdo entre Gobierno y oposición". Negó que esto sea "un frente antinacionalista".

LA CAMPAÑA

En elmarco de esta campaña conmemorativa de la Constitución, el PSOE va a movilizar a todos sus cargos públicos para que organicen charlas en las universidades y los institutos a fin de explicar a los jóvenes lo que representó y representa hoy la Constitución. Asimismo, a través de sus alcaldes y concejales, promoverá mociones en los ayuntamientos en defensa de la Constitución, sobre la base de un manifiesto en el que recuerdan que "simboliza el fin de la dictadura y la recuperación definitiva de la libertad". ambién presentarán propuestas para que calles y plazas lleven el nombre de la Constitución.