Así lo precisó Bustinduy durante su intervención en la Comisión de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030 del Senado, en la que valoró que “muy próximamente” la Cámara Alta “tendrá ocasión de debatir” dicho proyecto, teniendo en cuenta que la “mala atención al cliente” es el “motivo principal para la insatisfacción de consumidores”, tal y como, recordó, “muestran todos los estudios de mercado”.

“Esta es una ley que va a buscar establecer estándares de calidad y garantizar que algunos de los abusos más flagrantes que, en el día a día, sufren millones de consumidores en este país, dejen de realizarse”, advirtió.

En este sentido, puntualizó que la normativa va a garantizar el derecho a ser atendido “en tiempo y forma”, al establecer un periodo máximo para la resolución de las reclamaciones de 15 días y un tiempo máximo de espera para la atención telefónica de tres minutos.

“También la garantía de ser asistido por un operador debidamente formado si no se desea ser atendido por un robot o por algún mecanismo de inteligencia artificial”, abundó, al tiempo que indicó que la ley, además, “garantiza y recoge” el derecho a ser atendido de manera “personalizada” con una prestación “específica” en función de variables como la edad, la discapacidad o la situación administrativa.

LENGUAS COOFICIALES

En paralelo, hizo hincapié en que “también garantiza el derecho a utilizar las lenguas cooficiales en las reclamaciones ante grandes empresas en los territorios donde estas están reconocidas”.

Junto a ello, la norma va a incluir la prohibición de las llamadas spam, de tal manera que las compañías telefónicas “deberán bloquear las llamadas no consentidas y se declararán nulos todos los contratos que deriven de comunicaciones no consentidas”.

Además, consagra la obligatoriedad de reflejar el precio final de una compra “desde el principio” para “acabar con esta práctica de ir añadiendo gastos ocultos, gastos de gestión y otros derivados cada vez que se va avanzando” en dicha compra y permitirá “mejorar en la veracidad de las reseñas falsas”.

“Creo que este resumen muy breve del contenido de este proyecto de ley demuestra que es una ley de interés general”, reivindicó, al tiempo que dijo “confiar” en que el debate, tanto en el Pleno del Congreso, como “muy próximamente” también en el Senado, “esté a la altura de ese objetivo y que el resultado sea lo más provechoso posible”.