Bienestar animal

Bustinduy recibirá a dos organizaciones para abordar la ley de grandes simios

MADRID
SERVIMEDIA

El ministro de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030, Pablo Bustinduy, recibirá el próximo lunes a Proyecto Gran Simio y la Fundación Animal Guardians para abordar aspectos de una futura ley de grandes simios (chimpancés, gorilas, orangutanes y bonobos).

El Gobierno estaba obligado a presentar un proyecto de ley de grandes simios tres meses después de la entrada en vigor de la Ley 7/2023, de Protección de los Derechos y el Bienestar de los Animales. Ese plazo venció el 29 de diciembre de 2023.

El Proyecto Gran Simio y la Fundación Animal Guardians valoraron este lunes el “gesto” de Bustinduy de reunirse dentro de una semana con ambas entidades, lo cual interpretaron como “una muestra de voluntad política y compromiso institucional” para tramitar “la primera Ley de Grandes Simios del planeta”.

Ambas entidades acogieron con “esperanza” esa convocatoria después de que una campaña haya logrado reunir más de 71.000 firmas y el apoyo de más de 140 organizaciones para que España cuente con una ley de grandes simios. La reunión se producirá después de que la semana pasada muriera la primatóloga Jane Goodall.

“Esperamos que esta cita con el ministro sirva para desbloquear una deuda histórica, ética y científica con los grandes simios. No se trata solo de cumplir una ley, sino de dar un paso hacia una sociedad más justa con los únicos homínidos no humanos”, según Pedro Pozas, director del Proyecto Gran Simio.

Marta Esteban, presidenta de la Fundación Animal Guardians, confió en que la reunión suponga “el comienzo de un camino legislativo real y comprometido”. “España tiene la oportunidad histórica de ser el primer país del mundo en proteger por ley a sus parientes evolutivos más cercanos”, añadió.

PROPUESTAS

Durante el encuentro, ambas entidades entregarán a Bustinduy un borrador técnico de la ley, elaborado por expertos en bienestar animal, conservación y normativa, con medidas como la prohibición de uso de grandes simios en espectáculos publicidad y actividades comerciales; el fin de la cría en cautividad y de los traslados entre los zoos, y la reubicación progresiva a santuarios o centros de acogida especializados que respeten la etología y bienestar de esos animales.

La revisión de su situación en zoos, con cierre o reconversión de instalaciones que no cumplan los requisitos y dotar los santuarios y centros estatales que alberguen grandes simios de recursos económicos necesarios serán otras propuestas.

Garantizar los derechos básicos a la vida, la libertad, la integridad física y emocional, y la protección contra el sufrimiento; un registro y seguimiento estatal de todos los grandes simios en territorio español, y la cooperación internacional para su protección y conservación en hábitat natural también figuran en el documento.

“Nuestro objetivo es facilitar el trámite y ofrecer una base rigurosa y viable. Este borrador recoge años de experiencia científica y jurídica”, según Esteban, quien agregó: “Confiamos en que el retraso no se deba al desinterés o a la influencia del lobby de los zoológicos por encima del mandato legislativo de la Ley 7/2023”.

BASE CIENTÍFICA

El documento técnico se apoya en una sólida base científica que reconoce a los grandes simios como seres conscientes, con emociones complejas, inteligencia social y capacidad de comunicación y transmisión cultural.

“Son homínidos no humanos, miembros de nuestra misma familia evolutiva, con quienes compartimos más del 98% del ADN. Aunque todas las especies deberían tener el mismo derecho a tener una vida digna, esta ley de grandes simios es un primer paso en esa dirección que salda una deuda moral que tenemos con nuestros hermanos evolutivos”, indicó Esteban.

Investigaciones pioneras, como los proyectos con ‘Washoe’, la chimpancé que aprendió más de 350 signos de la lengua americana de signos; ‘Kanzi’, el bonobo que comprende frases complejas y utiliza símbolos en un tablero lexigramático, o ‘Koko’, la gorila capaz de dominar más de 1.000 signos y comprender más de 2.000 palabras habladas, han demostrado que estos animales no solo piensan y sienten, sino que pueden comunicarse, crear conceptos y transmitir conocimientos a otros individuos, evidenciando una auténtica transmisión cultural.

(SERVIMEDIA)
06 Oct 2025
MGR/clc