Una reducción que la caja atribuye a la ausencia de extraordinarios: entre enero y marzo del pasado año, contabilizó una plusvalía bruta de 512 millones por la venta de acciones de Abertis y realizó una dotación extraordinaria de 200 millones de euros.

El beneficio recurrente de la segunda caja de ahorros catalana experimentó, por su parte, un incremento del 52,5%.

La tasa de morosidad se situó, al cierre del primer trimestre, en el 5,67%, es decir, 0,39 puntos por encima del trimestre anterior.

En cuanto a la tasa de cobertura de la morosidad, fue del 111,7% incluyendo las garantías hipotecarias y del 52% sin incluir éstas.

La entidad presidida por Narcís Serra cuenta con una liquidez en "cerca de 4.000 millones de euros". En este ámbito, destaca la última colocación, este mes de abril, de la emisión de deuda con el aval del Estado, por valor de 1.250 millones de euros.

Por su parte, el margen de explotación aumentó, entre enero y marzo, un 54%, gracias a la positiva dinámica del margen bruto, que se incrementó el 10,6%, así como a la fuerte reducción de los gastos.

A este respecto, Caixa Catalunya destaca también la reducción del 23,3% de los gastos generales, fruto de su plan de contención de gastos, mientras que los gastos de explotación, en su conjunto, disminuyeron el 13,2%.

Asimismo, la entidad mejoró en 13,1 puntos la ratio de eficiencia, como consecuencia del incremento del margen bruto y de la reducción de los gastos de explotación.

La caja apuntó, además, que mantiene "un elevado volumen de inversiones en participaciones, por valor de 750 millones de euros, entre las que destacan Repsol y Gas Natural".